Galería Madres Solidarias

Licelotte Baigés

Para Licelotte Baigés la maternidad es el regalo divino que le permitió conocer un amor verdadero e incondicional. “Ser madre es la más grande bendición que he recibido en la vida. Mis hijos son mis mejores maestros para mostrarme mis lados de luz y de sombra. Han representado una oportunidad de crecimiento como ser humano”, destacó. Como directora ejecutiva de la Fundación Domínico Alemana para la Salud, encontrar el equilibrio entre el papel que juega como profesional dentro de la institución y sus deberes como madre ha sido un reto difícil pero que ha logrado vencer con el paso de los años. “Mis cuatro hijos, desde pequeños han aprendido a aceptar mi rol como profesional y comprenden el valor de darse a los demás. Creo mucho en educar a través del ejemplo. Ellos también conocen que tienen una madre al cien por ciento cuando me necesitan y que mi amor hacia ellos es prioridad frente a todo lo demás”, confesó a Diario Hispaniola. Desde el inicio de la pandemia, se ha dedicado a brindar apoyo emocional a personas que con necesidad de asistencia terapéutica ante los momentos de crisis emocionales y procesos de ansiedad, consecuencia de la pérdida de seres queridos o pérdida de sus puestos laborales. De igual modo, también ha participado en foros y charlas educativas a estudiantes universitarios con el fin de que descubran sus potencialidades para el emprendimiento o en webinars para empleados de distintas empresas para ayudar a reorganizar su personal hacia otro estilo distinto de trabajo.