Economía, salud y educación fueron los tres pilares que cimentaron el primer discurso del nuevo presidente de Argentina, Javier Milei, quien en una intervención breve y durísima calificó la herencia dejada por el mandatario saliente Alberto Fernández como la "peor" recibida por "ningún Gobierno" y fue aplaudido pese al anuncio de severos ajustes.