Ban Ki moon: Destrucción en Gaza avergüenza al mundo

El diplomático exhortó a la comunidad internacional a apoyar la enorme tarea de reconstruir Gaza, dando ayuda humanitaria a miles de necesitados y a atender a los heridos.

"Volveremos a construir, pero ésta debe ser la última vez que reconstruimos", dijo Ban a la Asamblea General. "Esto debe terminar ahora. Debemos regresar a la mesa de negociaciones".

"No debemos escatimar esfuerzos para convertir la actual calma en un cese al fuego perdurable que aborde los temas de conflicto que están debajo".

Ban dijo que eso significa poner fin al tráfico de armas y lanzar cohetes desde Gaza, abrir sus cruces, levantar el bloqueo de Israel y llevar a la franja gobernada por Hamas de regreso a un gobierno palestino unificado.

También pidió al grupo palestino cumplir con las promesas hechas por la Organización para la Liberación de Palestina que incluyen el derecho del estado de Israel a existir.

Kyung-wha Kang, coordinadora de ayuda humanitaria de la ONU, dijo que la organización y sus socios pidieron 367 millones de dólares para abordar de inmediato las necesidades de más de 500.000 personas, más de un cuarto de la población de Gaza, que "huyeron por sus vidas, sin nada". La funcionaria indicó que 65.000 personas perdieron todo porque sus casas fueron reducidas a escombros.

Kang describió una triste imagen de lo que llamó "total devastación" en Gaza: 144 escuelas y otras instalaciones dañadas; un sistema de salud público "al borde del colapso" con un tercio de hospitales, 14 clínicas y 29 ambulancias dañadas; más de un millón de personas sin acceso a agua y electricidad muy limitada, además de la prevalencia de munición sin detonar.

Ban señaló que la ONU comprende el derecho de Israel de defenderse de los cohetes de Hamas, pero agregó que "el horror desatado sobre el pueblo de Gaza" plantea dudas graves sobre el respeto por el derecho internacional, que obliga a distinguir entre civiles y combatientes y a respetar las proporciones.

En este sentido, la máxima autoridad de derechos humanos de la ONU, Navi Pillay, dijo a la Asamblea que "cualquier ataque en violación de estos principios... puede equivaler a crímenes de guerra".

Pillay indicó que en el conflicto murieron casi 1.900 palestinos, en su mayoría civiles; 64 soldados israelíes y tres civiles.