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Un niño trabaja en una tienda de venta de leña en Kabul, Afganistán. |
La FAO advierte de las peligrosas condiciones en que trabajan 130 millones de niños
Por EFE
viernes 28 de junio de 2013, 09:49h
La
Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO)
y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) advierten de que 130 millones
de niños trabajan en la pesca artesanal, la ganadería y la acuicultura y que
muchos de ellos lo hacen en condiciones "duras y peligrosas".
Ante
esta situación ambas organizaciones instaron a los Gobiernos a tomar medidas
para proteger a los que trabajan en la acuicultura y la pesca y a cumplir las
normas internacionales de protección infantil en el trabajo, informó ayer la
FAO, con sede en Roma, a través de un comunicado.
"El trabajo de este tipo
es intolerable", subrayó el subdirector general de la FAO del Departamento
de Pesca y Acuicultura, Arni M. Mathiesen, quien añadió que este tipo de
actividades "dañan su salud y aprendizaje y les impide con frecuencia
asistir a la escuela".
Según explicaron, muchos de estos niños se ven
obligados a sumergirse en profundidades peligrosas, a menudo por la noche, y a
permanecer muchas horas en plantas de procesamiento insalubres en las que
corren riesgo de contraer infecciones o intoxicaciones por la manipulación de
productos químicos.
"Todo trabajo que perjudique el desarrollo físico,
mental, psicológico, social y educativo de los niños es inaceptable y viola los
convenios internacionales", aseguró la directora del Programa
Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil de la OIT, Constance
Thomas. El informe precisa, no obstante, que no todas las actividades pesqueras
en las que participan los niños son indeseables, ya que algunas pueden ser
positivas para el desarrollo de sus habilidades prácticas y sociales.