La central nuclear de Zaporiyia se desconectó de la red eléctrica por primera vez en sus 36 años de historia el pasado jueves, y aunque ya se ha restablecido la conexión, el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, ha afirmado que "la situación sigue siendo muy peligrosa". Kiev urge a la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) a que envíe una misión a la planta lo antes posible.