Tres semanas después de que un terremoto de 6,4 se registrara en el sur de Puerto Rico, otro de 7,7 en la escala abierta de Richter ha sacudido el Mar Caribe entre Jamaica y el sur de Cuba, que ha dejado algunos daños materiales en varios puntos de localidades caribeñas y espectaculares imágenes, así como desalojos en algunas ciudades tan lejanas como Miami.