Felipe VI protagonizó en solitario la tercera y última jornada de la visita de Estado de los reyes de España a Perú, durante la que se reunió en Lima con personalidades vinculadas a las conmemoraciones por el bicentenario de la independencia del país antes de acudir a La Pampilla, en la vecina provincia de El Callao, mientras la reina Letizia emprendía viaje de regreso a Madrid.