Desde el inicio del siniestro los bomberos no pudieron controlarlo, que obligo a que decenas de familias fueron
desalojadas de sus hogares por el cuerpo de Bomberos de Santiago, así como también
la suspensión del servicio de gas propano que suministra la planta La
Herradura.
Decenas de niños y niñas manifestaron asfixia
e intoxicación que fueron provocados por la humareda creada por el fuego.
El subdirector de la Defensa Civil Francisco Arias, expresó
que el fuego se propagó más rápido debido a que la mayoría de las viviendas
están construidas en madera y zinc y esto provocó que el siniestro fuese tan
arrasador.
El cuerpo de bomberos y la policía de
Santiago de los Caballeros explicaron que al parecer el fuego fue provocado
"por desaprensivos" y que están trabajando para ofrecer apoyo a los
bomberos además de la Defensa Civil, el Ejército y la Policía.
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