El Gobierno inauguró el embalse de la presa de Montegrande, la primera fase de esta obra, que se construye desde hace unos catorce años entre Azua y Barahona y que, de acuerdo con el presidente Luis Abinader, representará la mayor obra hidráulica del Caribe.
Santo Domingo.- La obra, ejecutada por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi), cuenta con el apoyo financiero del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Para Abinader, esta presa representa un avance en la seguridad hídrica del país y, además, dará seguridad a las más de 51 comunidades del suroeste, históricamente afectadas por las crecidas del río Yaque del Sur.
Abinader señaló que a su llegada al Gobierno, los estudios técnicos, de factibilidad económica y diseño de las obras complementarias no estaban realizados, pero que tras la colaboración entre el BCIE, el Indrhi y el Ministerio de Hacienda se efectuó una licitación pública internacional dando como resultado la conclusión de los citados estudios en el mes de noviembre del año pasado.
Esos estudios, precisó, arrojaron un costo aproximado para las obras de 336 millones de dólares, cuya fase inicial ya está contemplada en el presupuesto de este año.
Estas obras complementarias incluirán la línea de conducción mixta para riego y suministro de agua por gravedad al acueducto del suroeste y la central hidroeléctrica, las obras de rehabilitación del dique Santana y las de riego de la margen izquierda del río Yaque de Sur.
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