Por :Nina Malíková
La pandemia, los conflictos bélicos y la escalada de los problemas económicos de los últimos años han hecho que la situación mundial sea difícil de vivir para todos nosotros, ya que todo este malestar crea tensión, miedo y ansiedad ante el futuro. La preocupación se ha instalado en nuestras mentes y en nuestros rostros.