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Columnas de humo fueron registradas este martes entre árboles de la localidad de Groveland, en California, Estados Unidos. |
California seguirá envuelta en llamas por lo menos dos semanas más
Por EFE
jueves 29 de agosto de 2013, 09:31h
Casi
4.200 bomberos participan en los trabajos de contención, medio millar más que
el martes, apoyados por más de 500 camiones, 62 excavadoras y 17 helicópteros
con el fin de detener el que es en estos momentos el incendio más importante en
activo en Estados Unidos y el séptimo más extenso de la historia de California.
El
incendio que ha asolado 75.000 hectáreas de bosque y amenaza la integridad del
Parque Nacional Yosemite continuará en activo hasta al menos el 10 de septiembre,
según una previsión realizada por las autoridades.
El fuego siguió este
miércoles avanzando en su duodécimo día en activo mientras se multiplican los
esfuerzos de extinción. Según los datos del Departamento Forestal y
Antiincendios de California solamente está controlado un 23 por ciento del
fuego a pesar de que cada jornada se incrementan los efectivos que lo combaten.
En tierra, los equipos se afanaron a lo largo de la jornada en realizar quemas
controladas para crear cortafuegos mientras que el peso del ataque a las llamas
se realizaba desde el aire dada la agreste orografía de la zona que dificulta
el acceso a pie. Las temperaturas en torno a los 30 grados y la baja humedad en
el ambiente, 24 por ciento, juegan también en contra de los equipos
antiincendios.
Las llamas han afectado ya a una pequeña parte del turístico
enclave de Yosemite y obligado a cerrar varios accesos al parque, si bien
continúa abierto en su mayor parte, incluida la zona más visitada de Yosemite
Valley.
El fuego, cuyas causas se investigan, fue detectado por primera vez el
17 de agosto en el vecino Bosque Nacional Stanislaus. El último parte de las
autoridades californianas cifró en 111 las construcciones destruidas por el
fuego y más de 5.500 estructuras corren peligro de ser arrasadas.
La calidad
del agua potable de la reserva de Hetch Hetchy, que riega el área de la bahía
de San Francisco, ubicada a 310 kilómetros al oeste y donde residen en torno a
2,6 millones de personas, no se ha visto afectada por el momento. Las
autoridades sí ordenaron la paralización el martes de dos generadores
hidroeléctricos que suministran a San Francisco por la proximidad del incendio.