La orden de arresto dictada por la jueza de la Instrucción Especial,
Wendy Martínez, incluye, además al mayor Luciano Gómez Cabrera; primer teniente
Bárbaro Torres Beltrán; sargento mayor Antolín de los Santos Zabala; sargento
Pedro José Almánzar González; cabo Agapito Muñoz Evangelista; raso Raidirys
Lironely García Miranda y Miguel Rosario.
Santo Domingo.- Francisco Domínguez Brito, Procurador
General de la República dijo ayer que los fiscales que participaron en el robo
de la Dican son narcotraficantes que se beneficiaron de la operación.
El exjefe de la Dirección Central Antinarcóticos y el
director de Operaciones de ese organismo, coroneles Carlos Fernández Valerio y
Féliz Humberto Paulino, fueron acusados formalmente ayer por la Procuraduría
General de la República de ser los cabecillas del robo y posterior venta de 950
kilos de cocaína por un valor estimado en RD$103 millones, por lo que serán sometidos a la Justicia por
tráfico de drogas y lavado de activos junto a otros 11 agentes de la Policía
Nacional.
El procurador Francisco Domínguez Brito
dijo que contra los fiscales adjuntos, el coronel Fernández Valerio, el
teniente coronel Paulino López y el mayor Rudy José Japa Álvarez existen
pruebas contundentes que los vinculan de manera directa en acciones ilícitas.
Al ofrecer detalles la Procuraduría General de la República
informó que junto a los oficiales citados fueron detenidos los fiscales de la
provincia de Santo Domingo Ramón Veras y Máximo Díaz Ogando, quienes
supuestamente planificaron y realizaron el "tumbe" de la droga, la
transportaron, la comercializaron y luego fue comprada por parte de un oficial
de la Policía Nacional.
El Ministerio Público acusó a los fiscales
adjuntos detenidos de presuntamente registrar las fichas con datos falsos sobre
la supuesta participación de agentes de la Dirección Nacional de Control de
Drogas que nunca estuvieron en los allanamientos.
"Con este hecho hay un mensaje muy claro,
jamás podemos permitir que quien está llamado a perseguir y castigar el crimen
organizado en todas sus manifestaciones, bajo ninguna circunstancia puede
aliarse al mismo y operar como vulgares delincuentes y narcotraficantes",
expresó Domínguez Brito.
"Y quien no entienda esto, quien pretenda
hacer de estas estructuras de persecución, andamios para fortalecer la
impunidad, que sepa que deben ir abandonando sus cargos", advirtió el
funcionario. "No pueden trabajar como si fueran una superintendencia del
microtráfico", dijo jefe del Ministerio Público.
La orden de arresto dictada por la jueza de la Instrucción Especial, Wendy
Martínez, incluye, además al mayor Luciano Gómez Cabrera; primer teniente
Bárbaro Torres Beltrán; sargento mayor Antolín de los Santos Zabala; sargento
Pedro José Almánzar González; cabo Agapito Muñoz Evangelista; raso Raidirys
Lironely García Miranda y Miguel Rosario.
Según la investigación, de los 950 kilos de cocaína, 250 kilos se entregaron a
los fiscales Máximo Díaz y Ramón Veras, y los 700 restantes quedaron bajo al
control del coronel Paulino, quedando parte de esa droga en el mercado local.
Se dice que en el interior de la caja de seguridad número 132, alegadamente
propiedad de Díaz Ogando y que figura a nombre de Omar Ogando Ogando en la
empresa Cajas de Seguridad Dominicana SRL, encontraron varios certificados de
depósitos y de inversión con un valor aproximadamente de RD$5 millones, títulos
de propiedad de locales comerciales, entre otras propiedades, así como 15 mil
dólares en efectivo.
Domínguez Brito refirió, además, que algunos implicados en el proceso han
entregado 1 millón 450 mil pesos en efectivo a las autoridades, de forma
voluntaria, así como dos vehículos y un apartamento. El procurador Fiscal detalló, además, que a los que colaboraron con la
investigación se les dará un trato distinto, o sea, se les tendrá "algún tipo
de consideración".