¿Indiana o Miami? El drama termina hoy

¿Miami Heat o Indiana Pacers? ¿El equipo de la una de las ciudades más mediáticas y turísticas de Estados Unidos o el equipo de la familiar y mucho menos visible para los grandes focos ciudad de Indianapolis? Hoy se define todo.

Qué el partido sea en Miami debe darle una ventaja a los Heat. Pero que llegaran a la instancia de tener que jugar un séptimo partido cuando fue de manera obvia el mejor equipo de la Conferencia Este en la temporada regular no es un dato muy tranquilizador.
Los Pacers tuvieron récord de 49-32 en la serie regular, un buen récord, pero no necesariamente espectacular. En cambio los Heat ganaron 66 y perdieron 16, lo que sí es un récord asombroso. En cuanto a las cifras ofensivas en la temporada regular Indiana estuvo lejos de los Heat, que marcaron 102.9 puntos por partido, mientras los Pacers anotaron 94.7 puntos por encuentro, 8.2 puntos menos por partido durante la serie regular.

Sin embargo, donde Indiana fue superior a Miami fue en el aspecto defensivo, permitiendo 90.7 por encuentro, los segundos mejores en toda la NBA, mientras Miami permitió 95 por partido. Nada mal, ya que les permitió quedar como el quinto mejor equipo defensivo de la liga.
Cuatro jugadores de los Pacers marcaron 10 ó más puntos por partido, siendo los líderes Paul George, con 17.4, y David West, con 17.1 puntos de promedio. En total siete jugadores tuvieron una media de 7.0 puntos por encuentros. En el caso de los Heat, tuvieron seis jugadores con más de 7 puntos por encuentro, pero sus dos principales anotadores fueron más prolíficos que los dos de Indiana. El Jugador Más Valioso, LeBron James, anotó 26.8 por partido, y 21.2 tuvo Dwyane Wade.
Indiana basa su fuerza ofensiva en una mayor distribución de puntos de la generalidad de sus jugadores. No es que Miami no pueda hacerlo, pero con jugadores como James, Wade o Bosch, está más determinado quienes harán los tiros a la canasta. El problema para los Heat es que si dos de sus tres principales anotadores son bien defendidos o pasan por una mala noche todo se les complica en demasía. Y eso ya ha pasado en esta final de Conferencia.

Esta noche, ¿se impondrá una ofensiva menor pero más colectiva o el talento de las tres principales estrellas de Miami? La respuesta está al alcance de unas horas y luego de que el cronómetro agote los 48 minutos reglamentarios.