Santo Domingo.- Los destinos del país para el período 2020-2024 se deciden en un momento complejo y de consolidación sobre el territorio de la Covid-19. A tan solo 72hs de la elección, el virus se ha expandido por todo el territorio nacional, y la enfermedad la han contraído más de 34.190 personas de las cuales se debe lamentar 765 víctimas mortales.
Con un régimen electoral que no obliga el voto a los ciudadanos, en un contexto en el cual rigen protocolos de seguridad sanitaria que dificultan la movilidad y teniendo en cuenta que la democracia ha venido perdiendo apoyo entre los dominicanos, no solo los resultados son inciertos sino que todo el proceso en sí mismo constituye un verdadero reto.
En la elección del domingo comparecen ante la ciudadanía cuatro partidos políticos principales. Todos con candidatos únicos a ocupar los cargos a la presidencia y vicepresidencia de la República. Estos son: Alianza País, la Fuerza del Pueblo, el Partido Revolucionario Moderno y el Partido de la Liberación Dominicana; este último ha mantenido el liderazgo del gobierno por los últimos 16 años. La mayoría de los partidos presentan documentos fácilmente accesibles sobre sus programas de gobierno, salvo Alianza País que presenta sus propuestas en formatos de videos cortos, entrevistas a su candidato y redes sociales.
En todos estos documentos se presenta un abanico importante de propuestas para los diversos ángulos del quehacer nacional. Allí, se pueden advertir las diferencias y matices ideológicos entre los diferentes partidos. Asimismo, las concepciones filosóficas y el país que cada sector imagina conducir durante los próximos cuatro años. Indudablemente, también se exponen las visiones que cada partido tiene para la educación. Esto, debido a la centralidad que esta política pública ocupa en cada una de las opciones políticas, pero también por la relevancia que ésta representa en términos del presupuesto público.
Recuérdese que desde 2013 la función educativa del Estado recibe una asignación promedio en torno al 4.4% del Producto Interno Bruto, superando una quinta parte del presupuesto público total (DIGEPRES, 2020). En consecuencia, la educación se ha convertido en el área de mayor inversión del Estado Dominicano y en términos del gasto público una de las de mayor proporción en la región. Además, este sector ha crecido continuamente en términos reales, año tras año, teniendo asignados para el año en curso de 194 mil millones de pesos (EDUCA, 2020).
Habida cuenta que permanece vigente el Pacto Nacional para la Reforma Educativa suscrito el 1 de abril de 2014 por más de 190 organizaciones, entre ellas todos los partidos políticos que comparecerán el 5 de julio ante la ciudadanía, no es de extrañar que en las grandes líneas de política en materia educativa no haya diferencias sustanciales. Los cuatro partidos políticos entienden y definen a la educación como un derecho humano fundamental, según lo consagra la Constitución, la Ley y los acuerdos internacionales suscritos por el Estado Dominicano.
Todos apuestan por el fortalecimiento de la educación pública. Todos coinciden en señalar que el reto mayor de la educación está en la calidad de los aprendizajes. Cada partido atribuye la importancia de expandir las coberturas en la primera infancia y la educación media. Ningún partido reniega de la participación y colaboración a partir de múltiples esquemas público-privados para apoyar la gestión del Estado en materia educativa. Todos los partidos concuerdan en señalar la centralidad de la figura del educador como actor estelar del proceso educativo y del estudiante como sujeto activo y protagónico de su formación.
Finalmente, todas las opciones políticas reafirman su voluntad de mantener vigente una asignación presupuestaria al menos del 4% del PIB para financiar la proporción de la educación regulada por la Ley 66’97. De modo que una primera e importante conclusión para la comunidad educativa y la ciudadanía que la compone, es la plena vigencia de los acuerdos y compromisos contraídos por el sector público en el Pacto Nacional para la Reforma Educativa independientemente de los resultados electorales.
En este sentido, cualquiera sea la opción que los dominicanos soberanamente escojan a partir del 5 de julio, la educación seguirá siendo una política prioritaria y eje vertebral en la estrategia de desarrollo para el país. ¿Quiere decir esto entonces que en materia educativa no hay diferencia alguna entre las opciones? En absoluto. Las diferencias están en los énfasis, la asignación de prioridades y sobre todo en los modelos de gestión para implementar una política que está más o menos consensuada entre los dominicanos desde 2014.
En la búsqueda de precisar los énfasis, las prioridades y los estilos de gestión que pretenden imponerle a la educación los diferentes partidos, EDUCA ha realizado dos trabajos simultáneos. En primer lugar, estudiar a profundidad los documentos programáticos de los diferentes partidos políticos. En segundo término, ha llevado adelante una serie de encuentros tele presenciales, transmitidos en directo por su canal de Youtube. La serie denominada “La educación que se acerca”, comprendió cuatro capítulos y fue desarrollada entre el 11 de junio y el 2 de julio de 2020.
En cada capítulo, un único partido político a través de sus líderes o referentes técnicos en materia educativa respondieron a las diversas preguntas que el presidente de EDUCA y miembros de su Junta Directiva formularon, exponiendo así sus principales propuestas de gobierno. La serie cuenta hasta la fecha con más de 2700 visualizaciones y centenares de comentarios de docentes, técnicos y ciudadanos interesados por el devenir de la educación nacional. A continuación, se detallan los énfasis y las prioridades que cada uno de los partidos políticos expresa en sus apariciones públicas y derivado fundamentalmente de una cuidadosa revisión de sus propuestas programáticas sectoriales.
Partido de la Liberación Dominicana (PLD)
En el caso del PLD, la educación preuniversitaria continuará teniendo un protagonismo central, en particular, en el nivel secundario. Concretamente, se pretende implementar reformas en la gestión educativa y pedagógica, universalizando la estrategia de formación continua centrada en la escuela y el programa de Jornada Escolar Extendida (JEE) para todos los niveles. Se plantea seguir expandiendo y modernizando la infraestructura educativa y la dotación de equipos e inmobiliarios didácticos.
También, impulsar la aplicación del Marco Nacional de Cualificaciones; reestructurar los contenidos curriculares, en particular los correspondientes al modelo de JEE. En cuanto a la educación técnica, una de las principales medidas que el PLD pretende impulsar en caso de renovar su liderazgo en el gobierno será la conformación de una red de Centros Técnicos Superiores, a través de alianzas público- privadas, que garantice al menos un centro en cada región del país. Asimismo, establecerá un programa de crédito educativo subsidiado para los estudiantes de educación superior (ver figura 1 y anexo).
Partido Revolucionario Moderno (PRM)
En caso de acceder al gobierno el PRM destinará gran parte de su esfuerzo a la educación universitaria, para adecuar la oferta académica en función de la demanda del mercado y las necesidades del país. Adicionalmente, propone asignar un porcentaje de los ingresos tributarios al sistema de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación sobre la base de un sistema de evaluación de desempeño, dando prioridad al sector público. Para la educación preuniversitaria, el PRM invertirá en la creación de espacios de refuerzo para estudiantes que lo requieran, establecerá un sistema riguroso de evaluación profesoral, universalizará la JEE, pero solo al nivel primario, así como, otras estrategias. En adición, buscará que sea posible que un titulado de Técnico de Nivel Superior puede continuar estudios en búsqueda de un título profesional o de una licenciatura (ver figura 2 y anexo). 
La Fuerza del Pueblo (FP)
Las propuestas de FP para el sector educación enfatiza en reformas necesarias al nivel universitario. Algunas de las acciones propuestas incluyen el desarrollo de un programa para incrementar el porcentaje de profesores universitarios con doctorado a un 10%; fomentar los programas de intercambio internacionales con universidades reconocidas para estudiantes y profesores; y construir 5 centros similares al actual ITLA, 5 Institutos Técnicos Superiores Comunitarios Regionales y el recinto UASD Este. En el nivel preuniversitario, la FP procurará orientar a las familias sobre el beneficio del ingreso oportuno al primer grado de la educación primaria e implementar un programa de evaluación física y mental desde el nivel inicial para diagnosticar alguna discapacidad que pueda interferir en el aprendizaje (ver figura 3 y anexo).
Alianza País (AP)
Finalmente, el partido (AP) pretende priorizar la educación preuniversitaria, sobre todo a nivel de primaria. Entre las acciones con mayor nivel de prioridad para este partido político destacan la necesidad de universalizar la educación bilingüe en todos los niveles educativos; la promoción de la creatividad y el sentido crítico de los alumnos, estimulando al estudiante a “aprender a aprender”; y universalizar la educación inicial. En relación con la educación técnica, pretende transformar paulatinamente los liceos tradicionales a institutos politécnicos. Por otra parte, para el nivel universitario, se propone desarrollar los programas de I+D+I (Investigación-Desarrollo-Innovación), y propiciar encuentros internacionales para profesores (ver figura 4 y anexo).
Anexo. Tabla comparativa de las diferentes propuestas para el sector educación por partido, tipo, nivel y dimensión educativa según objetivos y prioridades de política.
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