Llega primer barco con carbón para pruebas de termoeléctrica Punta Catalina

Santo Domingo.- Un barco con 38,516 toneladas métricas de carbón mineral llegó hoy al país para ser utilizado en la sincronización y pruebas de la primera unidad de la Central Termoeléctrica Punta Catalina (CPTC), que se construye en el sur del país.

La información fue ofrecida a la prensa por el vicepresidente de la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (Cdeee), Rubén Jiménez Bichara; y el administrador general de Punta Catalina, Jaime Aristy Escuder, durante un recorrido por la planta.

En octubre pasado la Cdeee y la estadounidense Xcoal Energy firmaron el contrato mediante el cual esa empresa venderá 462,000 toneladas métricas de carbón mineral a la institución local, para las pruebas de operación de la primera unidad de la CTPC.

La firma internacional participó en la licitación para la compra del carbón junto a otras 13 empresas, de las cuales seis presentaron ofertas y tres calificaron.

En sus declaraciones hoy a la prensa, Aristy Escuder señaló que “estamos registrando una nueva línea en la historia de la República Dominicana” y definió la plata como “la principal obra de nuestra nación”.

Asimismo, resaltó que la CTPC “brindará al país una mejor energía a precios competitivos, impulsando el desarrollo de la nación”.

En septiembre pasado, el Gobierno llegó a un acuerdo con el consorcio encabezado por la brasileña Odebrecht, a cargo de la construcción de la CTPC para terminar la obra.

Ese acuerdo consiste en la creación de un fondo de contingencia de 336 millones de dólares para garantizar la terminación de la obra.

Las partes se sometieron a un proceso de arbitraje ya que mientras el Gobierno asegura que el contrato con Odebrecht para la construcción de la termoeléctrica es de 1,945 millones de dólares, la multinacional brasileña asegura que los costos de construcción han elevado esa suma.

Este proyecto, cuya licitación estuvo bajo investigación, ha sido criticado por sectores políticos que aseguran que fue sobreevaluado y por grupos que denuncian que afectará al ecosistema y a la salud de las personas de la provincia Peravia, especialmente de la comunidades cercanas a Punta Catalina y a la ciudad de Baní.