Colombia busca unir piezas de viaje que terminó en tragedia en Ecuador

Bogotá.- El misterioso viaje comenzó en Cali, ciudad del suroeste del país, en donde a varios habitantes de las barriadas de El Guabal, San Judas y Colón fueron invitados a viajar a Ecuador por una mujer que al parecer también iba en el autobús y está entre los heridos.

“Yo pensé que de pronto era un político el que los había invitado pero esta es la hora en la que no sabemos nada y hay que dejar el asunto en manos de las autoridades”, dijo al respecto a periodistas José Rafael Hurtado, esposo de una de las pasajeras.

Otros cuentan que los invitaron a conseguir familiares y amigos que quisieran viajar a Ecuador, sin dar más explicaciones.

Una de las primeras inconsistencias que encontraron las autoridades sobre el viaje es que a pesar de salir de Cali, el autobús no siguió el recorrido normal de 725 kilómetros por el sur hasta Quito tomando la vía Panamericana, sino que tomó uno alterno por una carretera menos transitada.

La ruta que tomó el conductor desvió el autobús 334 kilómetros hacia el centro del país por el departamento de Huila, en cuya capital, Neiva, permanecieron seis días por una falla mecánica y a la espera de conseguir un repuesto.

“Yo me hice la pregunta sobre por qué tomaron la carretera a Neiva, pues esa no es la vía habitual. Sin embargo, mi esposa me dijo que había inconvenientes”, sostuvo Hurtado al respecto.

Una vez solucionado el inconveniente mecánico, el vehículo inició en Neiva un nuevo trayecto de 790 kilómetros hacia Ecuador por el departamento colombiano de Putumayo, una zona en su mayor parte selvática y cuya carretera no está en las mejores condiciones y es menos vigilada por las autoridades.

Hacia las 02.55 hora local (07.55 GMT) de ayer, en el kilómetro 8 de la vía ecuatoriana Pifo-Papallacta, en un sector conocido como la “curva de la muerte”, se produjo el accidente en el que se vieron involucrados el autobús y un todoterreno.

A partir de ese momento afloraron las preguntas sobre el paseo, toda vez que las autoridades ecuatorianas encontraron una copia del contrato que se firmó por el viaje en el que “aparece la identificación del conductor y la licencia que éste portaba al momento del hecho”.

Sin embargo, la Superintendencia de Puertos y Transporte de Colombia verificó que “uno de los dos conductores del vehículo no aparece en la base de datos del Registro Único Nacional de Tránsito (RUNT)”.

Otro hecho que llama la atención es que la Superintendencia indicó que “el vehículo presuntamente no portaba permisos de transporte internacional”.

Por ello, esta autoridad abrió una investigación preliminar contra la empresa Cooperativa de Transportes Especiales del Oriente, cuya sede está en la ciudad de Cúcuta, fronteriza con Venezuela, en el otro extremo del país.

El representante legal de la compañía aseguró que el contrato con el que se concretó el viaje fue firmado por Gino de Jesús Moreno Pradilla, un exgerente de la empresa, por lo que se demostró que hubo “fraude en la documentación”.

Este miércoles se conoció que los expertos de Medicina Legal de Ecuador aún deben identificar a 13 víctimas mortales.

El capitán Kleber Viteri, jefe de Medicina Legal de la provincia de Pichincha, donde se encuentra Quito, precisó a Efe que hasta el momento han sido identificados una decena de fallecidos, de los cuales seis son de nacionalidad colombiana, dos venezolanos y dos ecuatorianos.

Las autoridades ecuatorianas también denunciaron que la mayoría de los colombianos que viajaban en el autobús no tenía documentos.

Por ello, para colaborar en el proceso de identificación seis familiares de las víctimas viajarán desde Cali.

“Se va a enviar a Ecuador una comisión de seis personas, representantes de las familias, que llevarán toda la información, como fotos, fotocopia de los documentos y cartas dentales para agilizar el proceso”, dijo el presidente de la junta comunal del barrio El Guabal, Fabián Gómez.

Fany Carmona, familiar de otra víctima, precisó que “los heridos serán traídos a Cali en ambulancia mediante la colaboración de la Secretaría de Salud”.

Como consecuencia del accidente el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, destituyó ayer a varios funcionarios de tránsito por “la cadena de errores” que rodea el siniestro, mientras en Colombia renunció hoy el Superintendente de Puertos y Transporte, Javier Jaramillo.