Bad Bunny cerró su segunda noche de gira en Santo Domingo agradeciendo el apoyo dominicano. La presentación duró más de dos horas, destacando la casita como elemento central. Romeo Santos hizo una aparición sorpresa, pero hubo críticas por la elección del telonero y cambios en los asientos premium que generaron malestar.
Santo Domingo.- El Conejo malo cerró la segunda noche de su gira agradecido por el apoyo dominicano
"Gracias, República Dominicana, por el apoyo desde el día uno... no, desde el día cero. Iniciamos la gira en el lugar correcto", fueron las palabras de Bad Bunny en su segunda noche a casa llena en Santo Domingo, República Dominicana.
Benito Antonio Martínez Ocasio subió al escenario del Estadio Olímpico Félix Sánchez a las 9:30 de la noche, acompañado de la orquesta Los Padrinos —compuesta en su mayoría por jóvenes estudiantes del Conservatorio de Música de Puerto Rico— y de los Pleneros de la Cresta, agrupación de bomba y plena, ritmos autóctonos boricuas que lo acompañarán durante toda la gira.
La presentación del puertorriqueño se extendió por dos horas y 24 minutos, con notables diferencias entre esta gira y su residencia en el Choliseo de Puerto Rico. Entre las principales variaciones estuvieron el orden y la duración del repertorio, la ausencia de invitados y la puesta en escena.
Aun así, la icónica —y polémica— casita volvió a asumir el papel protagónico que ya tuvo en los 31 conciertos celebrados en territorio puertorriqueño.
La mudanza, una oda a sus raíces y su esencia, abrió la segunda presentación de Bad Bunny en suelo dominicano, justo el mismo tema con el que cerró los 31 conciertos de la residencia.
Tras interpretar temas como Callaíta, Pitorro de Coco, Weltita y Turista, Benito cantó el merengue Después de la playa, uno de los dos temas que ofreció de manera exclusiva para la República Dominicana.
La Casita
Tras finalizar la primera parte en el escenario principal, Bad Bunny se trasladó al otro extremo del estadio, a la Casita, donde continuó interpretando algunos de sus mejores éxitos y colaboraciones.
Durante esta parte del concierto se observó a varias personas intentando cruzar y saltar las barras de seguridad para acercarse al segundo escenario.
Romeo Santos, la sorpresa de la noche
Poco antes de finalizar, el bachatero Romeo Santos subió al escenario y, junto a Bad Bunny, interpretó BoKeTE, tema incluido en el nuevo álbum del boricua.
Santos saludó al público dominicano, que lo recibió eufórico: "Acho, RD es el final", dijo el artista, quien tras concluir el número abandonó de inmediato el escenario, vistiendo una pava, sombrero representativo del jíbaro puertorriqueño.
Críticas por telonero
A las 8:30 p.m. Chuwi, una agrupación formada en 2019 en Isabela, Puerto Rico, fue la encargada de abrir el espectáculo de Bad Bunny, lo que generó críticas entre los presentes que esperaban una contraparte dominicana que abriera el show.
Reclamos por cambios en boletos premium
Una ola de inconformidad se vivió en las redes entre quienes adquirieron boletos premium para el concierto de Bad Bunny, luego de ser informados, a pocos días del evento, de que sus asientos serían movidos a zonas más alejadas del escenario.
Muchos habían pagado sumas elevadas —algunas cercanas a los 30 mil pesos dominicanos— por ubicaciones privilegiadas.
El malestar aumentó al saberse que los cambios habrían sido realizados para habilitar nuevas localidades de menor costo, dejando a los compradores iniciales en clara desventaja.
Los afectados aseguran en videos que circulan en redes que no recibieron explicaciones oficiales, opciones de reembolso ni compensaciones, lo que consideran un irrespeto hacia un público que hizo un esfuerzo económico considerable. H.A.A