"La violencia y discriminación ejercida contra las personas LGBTI constituyen una gravísima violación a los derechos humanos que requiere reconocimiento expreso y atención específica e inmediata, con especial atención a la niñez y la adolescencia, según su diversidad sexual considerando su proceso de desarrollo", indicaron las defensorías en una declaración divulgada hoy en Tegucigalpa.