Otro joven colombiano murió este viernes en una jornada de graves disturbios en la ciudad de Popayán (suroeste), donde manifestantes incendiaron una instalación de la Fiscalía y se enfrentaron con la fuerza pública, en el marco de las protestas contra el Gobierno, que dejan ya más de 40 muertos en el país y varias denuncias de abuso policial.