Tras una etapa económica dulce impulsada por favorables vientos de cola, la irrupción de una borrasca pandémica provocará vientos huracanados de dirección caótica que podrían tambalear los cimientos de la economía mundial. Así, asistiremos a la aparición de un nuevo patógeno,(el DDD) que podría acabar arrasando todo rastro de brotes verdes en la economía mundial al poseer un ADN dotado de la triple enzima D (Deuda Pública desorbitante, Desbocada inflación y Desempleo endémico) y que podría generar un estancamiento secular (secular stagnation).