Por ese Duarte símbolo patrio que hoy recordamos, las letras del himno nacional resuenan
junto a la bandera que sublime ondea.
En el 2013, hace apenas dos años se celebró en la República Dominicana el Bicentenario del
natalicio de Juan Pablo Duarte, y hoy como cada año celebramos el 26 de enero el nacimiento
de un ser humano con cualidades y capacidades excepcionales, que cimentó la nación
dominicana, y fraguo la dominicanidad en su esencia misma de amor cohesionador hacia la
patria libre, soberana e independiente.
La imagen de Juan Pablo Duarte y Diez, ha pasado a ser un símbolo nacional, por el
peso de su significado en la historia dominicana y en la construcción de la
dominicanidad. Sin embargo hoy día, como si se tratase de una componenda para
desarticular los símbolos que crean un lenguaje que no requiere de palabras expresas
para que toda una comunidad se entienda, hoy día la imagen de Juan Pablo Duarte se
quiere exponer a ser como uno más de entre todos nosotros, y se dice que Juan Pablo
Duarte no tenía nada excepcional.
La verdad que El tenia todas las condiciones de un ser excepcional, por lo que en su
accionar nunca fue como cualquier hijo de vecino.
Juan Pablo Duarte era apenas un adolescente cuando inicia con su lucha libertaria, lo
hace a la edad en que tantos otros están pensando en estudiar, enamorarse, elegir
pareja, y constituir familia mas tarde. Él se dedicó en cuerpo y alma, como misión y
propósito de vida, a hacer libre su país.
Juan Pablo Duarte fue tan excepcional, que crea la red libertaria de la Trinitaria, bajo la
figura geométrica esencial del triangulo, y la figura trina o de la Trinidad, simbólica de
toda creación. Una organización sistémica de redes, que es la forma innovadora de
finales del siglo XX e inicios del siglo XXI, y la que ya en el siglo XIX, él había puesto en
práctica, con absoluta consciencia y éxito.
Esta red social libertaria e independentista laboro por varias décadas, haciendo su
trabajo en base a la cultura! ...Si! Juan Pablo Duarte y Diez, realizo una revolución por
la independencia del suelo que le vio nacer y que el constituiría más tarde como la
República Dominicana.
La República Dominicana es el único país de América que se ha independizado en base
a una revolución estratégicamente concebida para la "no agresión", para
fundamentarse en la paz, por lo que de manera excepcional creó y efectuó una
revolución en base a la cultura, con obras de teatro básicamente.
Lograr reencontrar la dimensión de ese líder y gran estratega, que dio la libertad a
todos los dominicanos y creo la nación que hoy nos da cohesión social, civil y legal, es
esencial y urgente.
Ese Duarte que eligió los escenarios donde desarrollaría la lucha
independentista, privilegiando la cultura, por ser esta la que da sentido y razón de ser
a nuestra conformación de Nación. Ese mismo Juan Pablo Duarte y Diez, que valoró a
la mujer como su igual, y estuvo rodeado de ellas, como soldadas valientes que daban
a la causa acorde a su potencial, ya fuera en el campo de batalla o en la sala de un
hogar organizando la acción imparable de la independencia.
Ese Duarte, joven, valiente, fogoso, y luego ese Duarte de más edad, siempre sabio y
paciente, que nunca dio cabida a un ego que empañara el ideal de ver una Patria Libre
y Soberana, tuvo siempre la capacidad de hacerse seguir por todo un segmento
importante de la población, la que por el ideal que él les inculco, fueron capaces de
ofrendar su juventud y su vida misma cuando el momento les llevó hasta ese sacrificio
de inmolar su vida.
Ese Juan Pablo Duarte, especial y excepcional, libera a los dominicanos del yugo
esclavizante de Haití. Por lo que la Republica Dominicana es el único país en toda
América que se independiza no de la colonia imperialista, sino de un país americanista
vecino, nada más y nada menos que de la primera nación libre de América. De ese
Haití que tan orgullosamente enarbola que es la primera nación que ha abolido la
esclavitud, una vez que se había, feroz e inmisericordemente liberado. Ese Haití libre
del sable del imperio, en vez de continuar con lo que se podía entender como una
ideología de libertad para América, se vuelca hacia sus vecinos, para imponerles el
yugo de la domininación y el sometimiento.
Por ese Duarte, símbolo patrio que hoy recordamos en su natalicio, al celebrar con
júbilo esperanzador su nacimiento, nos trae la historia musical en el viento, las letras
del himno nacional que resuenan junto a la bandera que sublime sobre el cielo
nacional ondea:
Compatriotas, mostremos erguida
nuestra frente, orgullosa de hoy más;
que Quisqueya será destruida,
pero sierva de nuevo, jamás.
Que es santuario de amor cada pecho
do la Patria se siente vivir;
y es su escudo invencible el derecho,
y es su lema: ser libre o morir.