Santo Domingo.- Mediante un comunicado, la empresa dominicana afirmó haber recibido "con gran asombro la declaración pública de los oficiales de Aduanas y Protección Fronteriza de los Estados Unidos, en relación a la detención de los embarques de azúcar sin refinar y los productos a base de azúcar" que produce la compañía.
"Las razones que sustentan esta medida no reflejan las políticas y prácticas de Central Romana, que por más de un siglo ha sido referente en implementar programas de responsabilidad social enfocados en la salud, educación, vivienda y alimentación al alcance de todos nuestros trabajadores y sus familias", reza la nota de prensa.
La Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP, en inglés) indicó en un comunicado que identificó cinco de los once criterios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que indican abusos a los trabajadores.
Estas infracciones incluyen, según CBP, la vulnerabilidad y aislamiento de los trabajadores, la retención de sueldos, condiciones abusivas de trabajo y vivienda, y exceso de horas de trabajo.
Ante estas afirmaciones, la empresa dominicana afirmó que en las últimas décadas ha destinado "inversiones millonarias para mejorar las condiciones de trabajo y de vida" de sus empleados, "garantizando salarios dignos y aumento de los beneficios, talleres de entrenamiento y formación, así como la capacitación en los derechos humanos y deberes" de sus trabajadores.
Desde Central Romana defendieron su correcta actuación "durante más de un siglo" frente a la disposición anunciada por la CBP, que supone que el personal de aduanas en todos los puertos de entrada a Estados Unidos retendrá los productos de azúcar no refinado (morena) y productos con azúcar hechos en la República Dominicana por esta compañía.
La orden que afecta a los productos de La Romana se suma a otras medidas que la Administración estadounidense ha adoptado para confrontar el trabajo forzado y otros abusos de derechos humanos, agregó el comunicado de la agencia.