Santo
Domingo.- Montilla de Medina expresa que De La Renta, quien falleció anoche, en
Connecticut, a la edad de
82 años, deja a su paso por la tierra una estela de gloria, bendiciones y
solidaridad, lo cual debe hacer vibrar la sensibilidad y el orgullo de los
dominicanos.
"Agradezco a
Dios haberme permitido compartir con él muchos de sus triunfos profesionales y
haber figurado en la selecta lista de personalidades del mundo a quien vistió
con calidad y entusiasmo, pero, sobre todo, de ofrecerme la oportunidad de
conocer al gran ser humano que fue".
Manifestó que Oscar
de la Renta no sólo consolidó su nombre a lo largo de la historia como símbolo
del mundo de la alta costura, de dominicanidad, de un hombre que amó
intensamente a su Patria, de la que se sintió siempre orgulloso, sino y,
esencialmente, como un ser humano, amigo, solidario, sensible, inigualable, de
cuya grandeza hablan sus obras.
"Ofrezco mis
condolencias y pido para todos la bendición de Dios en este momento de dolor
por la partida física de una persona que seguirá siendo un orgullo para
República Dominicana y todos cuantos lo
conocieron", dijo la Primera Dama Cándida Montilla de Medina.