El comité del organismo internacional instó al Gobierno de Perú a incluir a las organizaciones indígenas en la toma de decisiones para hacer frente a la pandemia en las poblaciones nativas, que suman más de 6 millones de personas, lo que representa a casi el 19 % de la población nacional.
El llamamiento exigió también proteger el acceso a las reservas naturales para indígenas en aislamiento voluntario y contacto inicial, espacios protegidos donde el virus ya ha ingresado a una de las cinco que hay en Perú y ha contagiado a 67 miembros del pueblo nahua, al que la gripe mató a la mitad de su gente en los años 80. Asimismo, recomendó adoptar medidas para mitigar el impacto socioeconómico de la crisis en los nativos y conminó al Estado a colaborar con Brasil y Colombia para atender a las poblaciones indígenas afectadas en las zonas de frontera.
Sin cifras claras
Solo algunas regiones, que tienen competencias para la sanidad pública, presentan en sus reportes periódicos la cantidad de indígenas afectados. Sin embargo, hay algunas que continúan sin hacerlo, como el departamento andino de Ayacucho, en el sur del país, lo que motivó este lunes una advertencia por parte de la Defensoría del Pueblo.
El Gobierno regional de Ayacucho argumenta que no incluye esta distinción en los reportes porque no tiene constancia de indígenas contagiados, pese a que en este departamento hay casi 400.000 nativos y se han confirmado cerca de 8.300 casos de Covid -19 en toda la región.
La Defensoría ha constatado evidencia de 97 casos de coronavirus en distritos de Ayacucho donde existen comunidades indígenas de las etnias asháninka y nomatsiguenga contagiadas, "pero se desconoce" el número de nativos contagiados en ellos.
Pruebas y vacunas en la capital
Esta población, que vive hasta ahora sin servicios básicos como agua y desagüe y pendiente de ser reubicados o de tener por fin un título de propiedad sobre sus precarias casas, fue uno de los primeros grandes focos de propagación del virus, pues en mayo más del 70 % de sus miembros estaban contagiados. Allí el Ministerio de Salud realizó este lunes una campaña de atención integral con pruebas de descarte de COVID-19 y vacunas contra la gripe y la neumonía, entre otras enfermedades.
Gobierno admite deuda
En ese sentido, detalló que ya se distribuyeron más de la mitad de los 1.200 concentradores de oxígeno adquiridos y que, a través de las brigadas de respuesta rápida, se han realizado más de 400 intervenciones en regiones con gran porcentaje de población indígena como Ucayali, Madre de Dios, Cusco y Pasco.
Tregua en protesta
Los nativos impidieron el reinicio del bombeo de crudo ante el temor de que el regreso de los trabajadores del oleoducto implique un mayor riesgo de contagio para las comunidades locales, y solo se retiraron de las instalaciones para iniciar el miércoles una negociación con el Gobierno sobre sus reclamos en atención en salud. Mientras tanto, el país continúa sin poder controlar al virus, cuyos contagios han vuelto a dispararse desde el fin del confinamiento en julio.