Santo Domingo.- La música está considerada como una de las cosas que causa más placer en la vida. Además libera dopamina, una neurohormona que se le relaciona con el placer. Muchos científicos han planteado a través de múltiples estudios, los efectos y beneficios de la música en las personas, los animales y en las plantas. ¡Los asombrosos efectos de la música en el cerebro!
La música afecta la química del cerebro, comprometiendo una red distribuida de estructuras cerebrales (Peretz y Zatorre, 2055). Según Peretz y Zatorre, la música afecta la química del cerebro, comprometiendo una red distribuida de estructuras cerebrales.
- Regula la velocidad de las ondas cerebrales y mejora los procesos del aprendizaje, el sueño, el humor y la atención.
- Fortalece la memoria, recrea recuerdos, ayuda a la creatividad y a la flexibilidad emocional y cognitiva.
- Incrementa habilidades lingüísticas, matemáticas, sociables, visoespaciales y motoras. Ayuda en las funciones ejecutivas y en la autonomía.
Escuchar música requiere habilidades perceptivas como:
1. La discriminación auditiva
2. La memoria auditiva
3. La atención selectiva
¿Qué le hace la música a nuestro organismo?
La música activa los dos hemisferios del cerebro al mismo tiempo.
En nuestra salud
La música beneficia a pacientes con trastornos del movimiento, dificultad en el habla, demencias, trastornos neurológicos, Alzheimer y en niños con capacidades especiales:
- Fortalece el sistema inmunológico, disminuye los niveles de ansiedad e incrementa el bienestar.
- Mejora la actividad motora de los pacientes con parkinson e incrementa el razonamiento espacial en pacientes autistas.
- Aumenta los niveles de proteínas asociadas con la producción de plaquetas, estimulación de linfocitos y la protección contra enfermedades.
- Mejora, mantiene e intenta recuperar el funcionamiento cognitivo, físico, emocional, social y ayuda a retrasar el avance de distintas condiciones médicas.
- Aporta en terapias de pacientes que sufren convulsiones. También, regula el nivel de hormonas relacionadas al estrés.
En el deporte
Se ha demostrado que los ciclistas que escuchan música requieren 7% menos de oxígeno que los ciclistas que practican en silencio.
- Escuchar música afecta los latidos del corazón, el pulso y la presión arterial. Además, cambia la velocidad de las ondas cerebrales.
- Puede ayudar a "confundir" a nuestro cerebro y anular las constantes señales de fatiga que nos envía.
La música y los niños
Un estudio, entre niños de 3 a más años, demostró lo siguiente:
- Los niños que escuchaban música o que escucharon música durante X tiempo... (falta ese dato) presentaron un incremento en su motricidad fina, así como en la discriminación auditiva (indispensable para el aprendizaje de otros idiomas).
- Presentaron un mejor vocabulario, mejores habilidades en su lenguaje no verbal.
- Y su entendimiento de la información visual mejoró, distinguiendo con mayor facilidad las similitudes, las diferencias de formas y los patrones.
Considera que...
- La música también puede afectarnos de forma negativa.
- La música que nos desagrada genera estrés.
- Al escucharla a volumen alto, puede generar ansiedad.
El nivel emocional al que nos conecta la música es muy poderosa, por esa razón, protege tu alma del contenido de letras en la música que estás escuchando. Dale "play" a tu reproductor y pon en funcionamiento la corteza auditiva, aquella que te conecta con el lado emocional.
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