www.diariohispaniola.com

En el Día del Amor y la Amistad

Reflexionemos sobre la amistad…

Reflexionemos sobre la amistad…

Por Rosalinda Alfau Ascuasiati
martes 14 de febrero de 2017, 23:00h
¿Resulta la amistad más propia de la madurez?
La amistad es una afección más propia de las primeras etapas de vida. Sin embargo, puede surgir más tarde, en cuyo caso resulta generalmente de excelente calidad.
Por lo regular, el humano traba abundante amistad, y de mucha solidez y duración en la niñez, la adolescencia y la juventud. En el banco de la escuela, de la universidad, el individuo entra y permanece en contacto con muchas personas muy afines a él. Natural y espontáneamente, experimenta simpatía, afecto, aprecio, apego… mucha afección hacia otros con inquietudes y sentimientos comunes.
Crea numerosos amigos, pero también muchos dejan de serlo en el camino. Porque hay mucho de instintivo. Inconsciente, maquinal.
Posteriormente, la probabilidad de trabar amistad, se presenta menos probable que por el pasado. El individuo evoluciona en círculos misceláneos: casa de amigos, medio de trabajo, comercio, transporte público… Entonces se relaciona con seres muy disímiles, con quienes las semejanzas resultan aleatorias.
A veces sin embargo, entabla amistad. En cualquier lugar y circunstancia -en la panadería o al doblar una esquina… en conversación ocasional-, puede experimentar simpatía por alguien, quien finalmente se transforma en amigo.
El adulto conoce mucho de sí mismo y de los demás. Tiene consciencia de su manera de ser y los requerimientos de su vida. Gracias a lo vivido, analiza en forma racional- las semejanzas que lo unen a su prójimo, y no solo las detecta por instinto, como en tiempo atrás.
Esta amistad en edad madura, por lo general, satisface a cabalidad.
¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios