Dos hombres, incluido un cabo policial, matan sus parejas y luego se suicidan

Santo Domingo.- En un comunicado, la institución identificó a las víctimas como Paola Rodríguez Castro, de 23 años; Reymira Hernández Arias, de 26; el cabo policial Héctor Ruiz Padilla, de 30, y el obrero Luis Miguel Bautista Morel, de 22.

Las muertes de Rodríguez Castro y Ruiz Padilla ocurrieron en un apartamento del edificio Carmen, en la calle Hermanas Mirabal, barrio El Resbalón, del sector de Bayona, en Santo Domingo Oeste.

Rodríguez Castro era hija de Ramón Rodriguez Morillo, de 55 años, residente en Sabana Perdida, quien dijo a las autoridades que ella residía en el referido apartamento y que en las primeras horas de la noche de este viernes compartía con ella y otras personas en la parte baja del edificio.

Añadió que, momentos después, subió hacia el apartamento de su hija, donde él se estaba quedando varios días y donde se encontraba el cabo Ruiz Padilla, mientras ella permaneció abajo con varias amigas.

Luego su hija subió con una amiga y el cabo, quien la esperaba en la puerta, le vociferó a la amiga que se marchara, que ellos tenían que hablar una cosa y, acto seguido, en presencia del padre, manipuló su arma de reglamento, una pistola marca Taurus calibre 9 milímetros, y le disparó a su hija en el tórax.

Rodríguez Castro narró que en esa situación se encerró con un nieto en una habitación, de donde escuchó una segunda detonación, correspondiente a un disparo efectuado por el homicida contra sí mismo en la región temporal derecha, con salida en el lado opuesto.

Miembros de la Policía Científica levantaron del lugar dos casquillos calibre 9 milímetros.

El segundo acto de homicidio-suicidio tuvo lugar en una pensión de la calle Enriquillo del sector El Mercado, de Maimón, provincia Monseñor Nouel, donde Bautista Morel degolló a Hernández Arias con un machete tipo colín y luego se suicidó ingiriendo una sustancia insecticida.

La mujer fue encontrada gravemente herida en una cama de la pensión de donde fue levantada por las autoridades y llevada al hospital público de la localidad, donde falleció momento después, mientras que Bautista Morel expiró en el piso de la misma habitación de la pensión, donde residía.

El médico legista actuante diagnosticó que ella falleció por herida cortopunzante en el cuello anterior por arma blanca (degollada) y el homicida, a causa de intoxicación tipo carbonato (envenenamiento).

Radamés Hernández Arias, de 43 años, hermano de la fallecida, dijo a las autoridades que la pareja se encontraba separada tras haber convivido durante ocho meses, y que ella fue a visitarlo a la pensión donde ocurrió la tragedia.