Nuevos hallazgos sobre riesgos diabetes luego del embarazo
Por EFE
jueves 06 de junio de 2013, 09:35h
Científicos
australianos identificaron un conjunto de factores que aumentan la posibilidad
de que las mujeres con diabetes gestacional padezcan tras dar a luz diabetes de
tipo 2, indica un estudio.
Estos factores de riesgo son: niveles de glucosa
sanguínea alta, presión arterial alta, un índice de masa corporal por encima de
los 30 (obesidad leve), así como bajos niveles de lipoproteínas de alta
densidad y triglicéridos altos.
Según la investigación, liderada por la doctora
australiana Anne Barden, las mujeres con diabetes gestacional a las que se les
ha detectado estos factores tienen un riesgo seis veces mayor de desarrollar la
diabetes del tipo 2 durante los siguientes diez años que aquellas con diabetes
gestacional que no presentan estas características.
Este perfil de riesgo
cardio-metabólico que se presenta en las mujeres con diabetes gestacional está
fuertemente vinculado con las posibilidades de desarrollar diabetes y
enfermedades cardiovasculares, señala el estudio realizado por la Universidad
de Australia Occidental y el Hospital Rey Eduardo en Perth, publicado en la
revista "Nutrición y Diabetes".
Si bien se sabía que las mujeres con
diabetes gestacional corrían el riesgo de desarrollar la diabetes en un período
posterior de su vida, no se había identificado con claridad que grupo en
particular tenía más propensión a padecerla, indicaron a la cadena ABC los
autores del estudio.
El embarazo provoca cambios en el metabolismo lipídico y
la presión arterial y muchas investigaciones se habían centrado solamente en
los niveles de glucosa para indagar sobre las causas que se vinculan al
desarrollo de la diabetes tras la gestación. No obstante, esta investigación se
centró en la combinación de la diabetes gestacional con otros factores
metabólicos como el sobrepeso, los niveles anormales de lípidos y glucosa y la
presión arterial alta.
El estudio mostró que las mujeres con estos factores
elevados de riesgo pueden ser identificadas seis meses después de quedarse
embarazada, lo que les da la oportunidad de prevenir que desarrollen esta
enfermedad, señaló Barden, profesora en la facultad de Medicina y Farmacología
de la Universidad de Australia Occidental.