La somnolencia diurna persistente puede indicar riesgos cardiovasculares ocultos, según la investigadora Naima Covassin. Esta condición, a menudo relacionada con la apnea del sueño y hábitos poco saludables, es más perjudicial en mujeres. Consultar a un médico es crucial si se experimenta cansancio excesivo a pesar de dormir bien.
Santo Domingo.- Sentirse somnoliento durante el día, incluso tras haber dormido por la noche, podría ser más que simple agotamiento. Según la investigadora cardiovascular de Mayo Clinic, Naima Covassin, esta condición podría estar relacionada con riesgos ocultos para la salud del corazón, especialmente si se presenta de forma persistente. Aunque no se ha establecido una causa directa, diversos estudios han demostrado una fuerte correlación entre la somnolencia diurna y los trastornos cardiovasculares. Covassin advierte que esta somnolencia puede ser síntoma de apnea del sueño no diagnosticada, una condición que interrumpe la respiración durante el descanso y que está asociada con hipertensión, disfunción vascular y otros problemas cardíacos.
Además, el cansancio constante se vincula con hábitos poco saludables, como dietas ricas en azúcares, grasas y alimentos ultraprocesados, que aumentan los niveles de inflamación en el cuerpo, un factor estrechamente ligado a enfermedades del corazón. La investigadora subraya que las mujeres son biológicamente más vulnerables a los efectos negativos de la falta de sueño. Estudios experimentales han demostrado que las mujeres privadas de descanso presentan mayor propensión a sufrir hipertensión, deterioro vascular e inflamación. Un factor clave es el descenso en los niveles de estrógeno y progesterona en mujeres con apnea del sueño, lo que agrava el riesgo cardiovascular.
Si una persona duerme al menos siete horas por noche y aún así experimenta somnolencia excesiva durante el día, es recomendable consultar con un médico. El profesional puede evaluar el historial clínico, descartar causas como deficiencias nutricionales o efectos de medicamentos, y recomendar estudios especializados como la polisomnografía o la prueba de latencia múltiple del sueño. La somnolencia diurna no debe subestimarse. Más allá del cansancio, puede ser un síntoma silencioso de alerta para la salud cardiovascular, especialmente en mujeres. La prevención comienza con la conciencia.lc