Para esta investigación que les presento hoy fue necesario leer más de 3,000 páginas de informes y textos. Eso enriquece mucho. Sin embargo, enriqueció mucho más esos libros abiertos que fueron las decenas de empresarios de primera, segunda y tercera generación; fundadores, continuadores y sucesores, entrevistados en Moca, San Francisco de Macorís, Santiago, Puerto Plata y el Cruce de Guayubín, (y uno que otro en Santo Domingo) porque si hay algo que enseña y enseña con fuerza es la vida, las prácticas, las experiencias, las dudas, las certezas, los aciertos… así caminan nuestras empresas familiares en este Cibao tan querido por todos nosotros.