La primera jornada de la 17 edición del Festival Internacional de Jazz de Puerto Príncipe comenzó con la participación de artistas nacionales y de otras latitudes, a pesar de la grave inseguridad en el país, marcada por el aumento de los secuestros y los ataques armados.
Puerto Príncipe.- "Estamos encantados de darles la bienvenida a la 17 edición de PapJazz. Es una edición que no olvidaremos pronto. Ha habido muchas turbulencias en esta oportunidad. Nada fácil, nada fácil", declaró Joël Widmaier, presidente de la Fundación Haití Jazz, organizadora del evento, en su breve discurso de presentación de la velada, en un hotel de Pétion-ville, en lo alto de la capital.
Esta primera fecha se celebró ante un público de aficionados a la música, el jazz y la cultura. Abé Rabade Trío, de España, Beethovas Obas, de Haití, y Richard Bona, de Camerún, dieron el pistoletazo de salida al Festival, que este año regresó a Puerto Príncipe tras celebrarse el año pasado en Cap-Haitien (norte), la segunda ciudad del país.
"Estamos muy contentos de volver a Puerto Príncipe. PapJazz estuvo en Cap-Haitien el año pasado. Nos recibieron muy bien. Pero esto es el Festival Internacional de Jazz de Puerto Príncipe. Tiene que estar en la capital", añadió Milena Sandler, directora general de la Haití Jazz Foundation, al recordar que muchas embajadas colaboran con el Festival, entre ellas las de España, Estados Unidos, Alemania y México, sin olvidar la Unión Europea y la Unesco.
La ministra de Cultura de Haití, Emmelie Prophète, aprovechó la ocasión para subrayar la importancia de un festival de estas características en el contexto actual y, de paso, elogiarlo. "Nuestro PapJazz es un amor a primera vista que perdura y vuelve cada año en música y convivencia como una niebla a la que aferrarse en estos tiempos difíciles que hemos conocido", declaró.
Para la ministra de Cultura "la música siempre ha sabido consolar y, sobre todo, encontrar las palabras justas para imprimir a las esperanzas y a las penas perdidas. Todos los que concibieron la idea de un Festival de Jazz en Haití dieron lo mejor de sí mismos para transformar este proyecto en un acontecimiento prestigioso y educativo. Son momentos musicales que encantan y sorprenden".
La funcionaria añadió que "el festival sigue, a pesar de todo, reuniéndonos en el sublime foco de la música". El encuentro internacional se extenderá hasta el domingo próximo.
Para Prophète el éxito de PaJazz se debe a que el festival se ha fijado como misión acoger a estrellas internacionales de la música junto a los mejores talentos haitianos, al tiempo que fomenta el surgimiento de jóvenes artistas "que no dejan de sorprendernos".
Este año, PapJazz acoge a artistas de Cuba, Camerún, México, Francia, España y Martinica entre otros, con una fuerte representación de haitianos locales y de la diáspora. Además de las actuaciones musicales, el programa de este gran acontecimiento artístico incluye ocho talleres y la proyecció0n de seis películas.
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