La exclusividad católica para realizar bodas religiosas en República Dominicana llegó a su fin

La boda fue realizada en la sede central de la Junta Central Electoral (JCE), convirtiéndose la pareja de veinteañeros en una pareja famosa, por lo menos por algunos días. Para muchos cristianos no católicos seguramente serán famosos por ser, aunque solo fuese circunstancialmente, quienes sellaron el primer matrimonio religioso no católico en República Dominicana reconocido legalmente por el Estado.

La Ley 198-11 que regula los matrimonios religiosos en República Dominicana data de agosto de 2011, pero no es dos años después que tienen finalmente real aplicación.  El primer artículo de dicha ley sobre el objetivo de la misma expresa que "La presente ley tiene por objeto establecer un marco jurídico que reglamente las condiciones y formalidades bajo las cuales se reconocerá efectos civiles a los matrimonios religiosos celebrados por las iglesias establecidas en República Dominicana de conformidad con las leyes, cuyas relaciones con el Estado no estén regidas por un acuerdo internacional". 

La JCE anunció que en los próximos días unas 30 parejas de credos religiosos de iglesias evangélicas realizaran sus bodas amparados en la Ley 198-11.  El párrafo II del Artículo 3 de la citada ley establece que "Será facultad de la Junta Central Electoral la creación del sistema de registro para todas las instituciones religiosas interesadas en celebrar matrimonios religiosos al amparo de la presente ley"; mientras el párrafo III del mismo artículo dice que "Solo se reconocerá efectos civiles al matrimonio religioso oficiados por los pastores, sacerdotes o ministros de tales iglesias, debidamente autorizados por la entidad de que se trate y provistos de la licencia otorgada".

A 32 pastores de varias iglesias y denominaciones cristianas les fueron entregados certificados y carnets autorizándoles a realizar matrimonios religiosos validados por el Estado dominicano. La entrega de esas certificaciones, previo al matrimonio de Leidy Laura Cabreja y Baldwin Rodríguez, estuvo a cargo del presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario; quien estuvo acompañado del presidente del Tribunal Superior Electoral, Mariano Rodríguez; y del presidente del Tribunal Constitucional, Milton Ray Guevara.  

Unos 435 pastores de más de 50  iglesias evangélicas han recibido cursos y talleres para poder oficiar bodas, pero deberán cumplir ciertos formalismos antes de ser autorizados por la JCE para la realización de bodas, informó Rosario.  

El presidente de la Junta Central Electoral destacó que el matrimonio de ayer fue "la primera ceremonia matrimonial oficiada por un funcionario de una institución religiosa que no tiene acuerdo internacional con el Estado dominicano", en referencia sin mencionarlo al Concordato establecido entre República Dominicana y el Vaticano en los años 50 del pasado siglo.  

Roberto Rosario enfatizó también en la libertad de culto de cada persona, la cual está consagrada en la Declaración Universal de los Derechos Humanos. "Para que esta libertad sea real, el Estado debe garantizar sus manifestaciones más amplias, y el matrimonio es uno de los hechos más significativos de la vida humana", añadió.