Santo Domingo.- La ceremonia de entrega fue presidida por Félix Manuel Lora, presidente de Adopresci y contó con la presencia de Marianna Vargas, directora general de Cine, así como de José Enrique Rodríguez, director de la Cinemateca Dominicana. Esta entrega fue posible gracias al patrocinio de Logomarca, Editora Buho, Cinemateca Dominicana y DGCINE.
Los galardonados fueron el director de “Malpaso” Héctor Manuel Valdez y sus productores José Ramón Alama, Vicente Alama, Michael Carrady, Juan Carlos Gómez y Fior D´Aliza de Valdez, quien los representó. “De las ocho producciones estrenadas el pasado año, cuatro largometrajes pudieron establecer el crecimiento técnico y argumental del cine local, manifestando la valentía de seguir construyendo películas con identidad nacional”, dijo el crítico de cine Félix Manuel Lora, presidente de Adopresci.
Por su parte, Héctor Manuel Valdez, director del filme premiado, agradeció a Adopresci por el premio, así como la presencia de la nueva directora de DGCine. También agradeció a cada una de las personas que hicieron posible la producción de “Malpaso”, particularmente en la actuación de Vicente Santos y los dos jóvenes actores protagonistas, Ariel Díaz y Luis Bryan Mesa. Igualmente a los actores Pepe Sierra, Marie Michele Bazie , Ramón Candelario y, al pueblo de Jimaní por la cálida acogida del crew y el cast que permitió poder rodar en tiempo y forma.
El joven director agradeció también a sus padres, en especial a su madre, Fior D’ Aliza de Valdez, quien le inculcó el amor por el arte, pero sobre todo por la justicia social y el respeto a las distintas culturas. “Justo en estos tiempos difíciles en que estamos viviendo se ha exacerbado bastante la brecha de la desigualdad y para nosotros es de suma responsabilidad ser voceros y catalizadores de la realidad, dar visibilidad a la vida en la frontera”.
“Malpaso” de Héctor Valdez resultó electa como mejor producción cinematográfica, dentro de los ocho largometrajes exhibidos en el 2020, entre las que también se encuentra el documental “Santo Domingo, primera de América” de José Enrique Pintor, las cuales fueron analizadas bajo el prisma crítico de los miembros de Adopresci que las consideraron ejemplos a destacar del pasado año.
De esta selección Adopresci manifestó, como criterio fundamental, que: “Malpaso viene a introducirse en ese particular catálogo de exploración fronterizo, siendo un filme cuyo relato tiene un peso muy específico en ese particular punto territorial. Su estética en blanco y negro, como una forma de imprecisar los contornos y realidad de esa misma frontera, casi inexistente entre República Dominicana y Haití, le otorgan un valor artístico predominante como filme que sabe articular un discurso social de carencia y una visual que va en consonancia con la calidad dramática de sus personajes y contexto geográfico al cual trata de aproximarse”.
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