www.diariohispaniola.com
El gigante americano se ha despertado.
Ampliar
El gigante americano se ha despertado. (Foto: Foto cortesía U.S. Navy )

El gigante americano se ha despertado

Por Alfonso M. Becker
«Dormir es un riesgo, porque la muerte no tiene horas prefijadas, y nadie está seguro de despertar. El sueño es el mensajero de todos los secretos en la aventura siniestra de todas las noches.» Giovanni Papini
La narrativa apocalíptica de la pandemia parece que da energía mecánica a los “muñecos” propagandistas mahometanos del más bajo instinto, y a las matrioskas políticas del Kremlin, rellenas de sarcasmo.

A tenor de lo que se publica, tanto en Rusia como en las violentas tierras del islam, los titulares son la sempiterna letanía antiamericana; mientras el islam está cargado de fanatismo y de odio, los rusos están cargados de ironía, de burla y del puro instinto de la mosca cojonera.

Lo más relevante quizás sea que, tanto los asesinos islámicos como los rusos, han pasado de emplear el término más suave de “decadencia” estadounidense, durante los últimos 30 años, a utilizar en su narrativa el vocablo “colapso” para pontificar que Estados Unidos está en bancarrota, que el dólar ha dejado de ser la marca monetaria dominante, y que los chinos heredarán la tierra…

En el discurso típico de los perdedores; el relato que siempre se refleja la ansiedad como la que padece Rusia con sus serias dificultades económicas que solo podrán ser resueltas asociándose con Estados unidos.

Pero lo más nauseabundo es el sentimiento mahometano de odio que ha nutrido al islam durante siglos, y el hecho de no aprender nada de toda una vida corroídos por los malos deseos y las continuas derrotas.

Basta que haya aparecido una emergente China como potencia económica y militar para que los débiles del multilateralismo deseen con maníaco fervor que Beijing se adueñe del planeta.

No deja de ser curioso que el moro, sobre todo, ni siquiera se dé cuenta de la esclavitud en la que lo mantienen las pobres ideas en las que ha sido educado.

Solo saben odiar a judíos, a los estadounidenses y a todos los que llaman infieles… Ni quieren saber que los musulmanes uigures son esclavos de los chinos y los están exterminando… Pero aplauden a China y a todos los que son enemigos de Washington.

América is not dead… Eso lo sabe muy bien Vladímir Putin. Pero el presidente ruso siempre ha sido discreto limitando sus críticas de galería hacia los Estados Unidos. Meterse con los americanos es un vicio que ya se ha vuelto rancio en el Kremlin; algunas veces absurdo y desmedido.

La década de los 90 del siglo pasado, en plena descomposición del imperio soviético, los rusos sufrieron una auténtica “pandemia” económica de la que solo se pudo salir vendiendo armas a una China emergente. Ningún país en este mundo ha vendido más armas a un solo cliente que Rusia.

Calculadora en mano, se podría decir que la catástrofe financiera de los rusos soviéticos solo fue posible superarla porque China compraba, absolutamente de todo, a los vendedores rusos.

Ese éxito de ventas, a la vista de todo el planeta, hizo nacer todo tipo de rumores y “evidencias” mundanas de un bromance entre Vladímir Putin y Xi Jinping por el “pequeño detalle” de que China había salvado al complejo militar industrial de una Rusia en bancarrota.

Los más viejos de la CIA señalaban a los novatos que en la profesión de espía, lo primero que hay que comprender perfectamente es «lo que es estrictamente normal» para tener luego, alguna posibilidad de detectar «anomalías»…

Así que para dilucidar el viejo dilema de la alternativa única para Rusia, sostenida por Zbigniew Brzezinski, no se debería especular con los buenos negocios y pontificar alianzas militares que solo existen en las cabezas calenturientas de los pervertidos “locos de amor” por las guerras…

Vladimir Putin ha conseguido una economía sostenible aprendiendo mucho de los Estados Unidos. Al presidente ruso le gusta mucho decir que todo vale mucho dinero y nadie da algo por nada… “Nada es gratis”.

La economía de Rusia se mueve como puede, y a duras penas, por ejemplo, es la cuarta parte del PIB de Francia. O sea, Rusia es un gran país con muchos recursos pero su economía es la de un país pobre que sigue adelante a duras penas.

Así que el mayor cliente de armas de toda la historia de Rusia no tiene porqué ser un aliado incondicional de China ante un hipotético “choque de trenes” entre los Estados Unidos y la República Popular China.

El “besuqueo” propagandístico entre Rusia-China es pura retórica de supervivencia ya que Vladímir Putin tiene serios problemas económicos que poco a poco crecen y pueden hacer estallar una revuelta en Rusia.

La famosa cantinela de Putin sobre «asociación estratégica» con China solo deben contemplarse, por el momento, como un estrafalario ditirambo en tiempos de guerra. Entienda el lector que Rusia está en medio de dos potencias militares que se dirigen a una guerra abierta.

Esa guerra, con toda seguridad, comenzará con una extraordinaria violencia ejecutada con hardware “convencional” y puede desembocar en un intercambio nuclear que nadie podrá detener.

Los chinos se ven fuertes y ya están utilizando todo el arsenal; el “todo vale” ya ha comenzado dejando escapar un virus que estaba destrozando la economía china y que les ha servido para propagar la pandemia e “igualar” a los contendientes o competidores globales…

Según Washington lo ve, la China despiadada está atacando a los Estados Unidos en todos los frentes. Y en Foggy Bottom se habla de ajustar cuentas con los «asesinos del Partido Comunista chino»…

No se debe olvidar que el actual Secretario de Estado, Mike Pompeo, fue jefe de la CIA; y por la Avenida de Pensilvania, bien sea en dirección a la Casa Blanca, o en la opuesta hacia el Capitolio, solo se ven coches del servicio secreto, a toda velocidad.

No se sabe muy bien el porqué se ha corrido el rumor de que Washington le tiene, si no miedo, un cierto respeto a China… Eso es un error, y sobre todo denota un desconocimiento absoluto de la república estadounidense.

Supongo que ya es de dominio público, pero por si no lo saben, Estados Unidos se prepara para responder militarmente a China, a partir de ahora. Y cuando digo “ahora” es ahora.

Quizás los incidentes relacionados con infestación del personal naval en algunos buques de superficie y , sobre todo, en dos portaaviones, ha dado una imagen de cierta debilidad manifiesta. Pero no es así.

Beijing debe medir lo que hace, América puede darle un susto de muerte… Si quiere el lector imaginar algo parecido, sería como intentar espabilar a un peligroso guerrero en estado de coma que responde con un despertar de extrema violencia como mecanismo de defensa ante los miedos primarios.

Y el Pentágono ha despertado apuntando a la cara con un revólver. Es una metáfora de la gravedad en los mares de China. El People's Liberation Army se mueve con agresividad y sin dar un paso atrás. La inteligencia americana tiene documentos que indican que el PLA quiere hacer una demostración fuerza…

Las dictaduras comunistas saben manejar muy bien los tiempos de guerra, y en el caso de China podemos asegurar que están dispuestos a "todo" para conseguir un poder indiscutible y omnímodo. La "paciencia" china es el arte de socavar el poder de sus vecinos y someterlos mediante una amenaza abrumadora, constante y estresante, en todos los "escenarios" conocidos, y con una violencia extrema, progresiva y sin límites…

La US Navy ha desplegado 15 barcos de guerra en los mares de China; la más grande demostración de fuerza desde la Segunda guerra mundial, a la espera de que dos portaaviones se acerquen con un peculiar grupo de ataque que serían escolta australiana, japonesa y otros aliados de la zona.

En posiciones no declaradas, el US Marine Corps, se está distribuyendo por una docena de islas con cajas de herramientas no especificadas. Lo cierto es que China es una amenaza y un desafío de seguridad significativo. El jefe del Comando Indo-Pacífico, Almirante Harry Harris, ha dejado claro que hay que templar armas y mantener a los transportistas a distancia segura.

Se espera que un contingente numeroso de barcos no tripulados, le den “profundidad” de costa a la flota del Almirante Harry. Todo este desplazamiento es inusual cuando todavía se sufren los efectos de la pandemia.

Significa que Washington va en serio y que acepta el desafío de los chinos, a pesar de haberse dormido en los laureles… Washington ha comprobado que dormir es un riesgo enorme.

La lectura de Papini explica que la muerte no tiene horas prefijadas, y nadie está seguro de despertar. El sueño es el mensajero de todos los secretos en la aventura siniestra de todas las noches.

El gigante ha despertado, hay un cambio de paradigma, muy a pesar de que parte de la tripulación de los dos transportistas (unos 300 marineros) siguen en cuarentena… Quizás lo que ha impresionado a Beijing es que Washington no se achica y tiene a toda la flota en alerta de combate. Incluso los portaaviones.

Por otra parte, en ubicación desconocida, los submarinos de ataque nuclear de la US Navy, esperan a que Xi Jinping cometa una grave equivocación para dar una respuesta “adecuada”…

El mensaje hacia Beijing es que el “hueso” está de vuelta en Guam (así se llaman a los bombarderos nucleares, B-52, B1 Lancer, y sofisticados aviones de guerra electrónica. Todos cargados de “regalos” para los chinos…

El carrier USS Ronald Reagan se dirige a la región mientras se da un respiro a los otros transportistas en Guam… Ya están posicionados los buques de combate litoral y de carga seca por los mares más violentos del planeta…

Sí… Estados Unidos ha despertado, lo están acorralando y atosigando potencias emergentes a las que se han unido potencias regionales de medio pelo como Irán y sus secuaces en Libano Y Yemen.

Deberán saber que, una vez que comience la pelea, no quedará nada de pie… Porque los marinos estadounidenses siempre han soñado con grandes empresas. Mantuvieron el sueño y lucharon hasta convertirlo en realidad.

La inteligencia militar americana deja bien claro que la amenaza biológica de ingeniería ya se ha desplegado por parte de China y se ha usado a pequeña escala contra los Estados Unidos… No le saldrá gratis a los chinos.

Veamos qué sabe hacer China…

Está claro que la hecatombe se avecina.

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (4)    No(0)

+
0 comentarios