Costos de producción, precio de mercado y precio ambiental.

" Los costos de los agregados varían en un amplio rango en función de múltiples factores, en los que podemos citar: emplazamiento de la cantera, metodología utilizada, volúmenes de producción, nivel de mecanización, eficiencia de los equipos, costos de adquisición o arrendamiento de los terrenos, abrasividad del material, granulometría del material in situ, etc. Lo cierto es que el costo de producción del agregado de río oscila entre RD$ 20 y RD$ 40 pesos por metro cúbico, siendo las plantas con mayor capacidad las que registran los más bajos costos unitarios, requiriendo sólo palas mecánicas, dragalinas, camiones, trituradoras y cribas para tamizado. En las canteras de calizas, en cambio, se requiere adicionar los costos de barrenación, dinamitado y trituración primaria, costos que pueden ser compensados con altos volúmenes de producción, pero que oscilan entre 50 y 60 pesos por metro cúbico para volúmenes superiores a las 500 mil toneladas por año". ( Ing. R. Osiris de León: 2000). El metro cúbico de grava y arena para la construcción de hormigón de edificios antes del mes de abril del año 2000, se cotizaba entre RD$ 150 - 180 pesos. En el mes de abril, cuando el ex-presidente Leonel Fernández presionado por las comunidades de San Cristóbal detuvo la explotación de las granceras en los ríos de esa provincia, el precio del metro cúbico de grava osciló entre RD$ 450 y 550 pesos. Una vez el presidente Fernández se retractó, el precio descendió y se estabilizó entre RD$ 220-260 pesos, que es el precio actual. Esos hechos muestran que los mercados de esta industria son muy sensibles a las opiniones del Poder Ejecutivo. Esa es una lección a tomar en cuenta. Demuestra además que el metro cúbico en calizas es competitivo al metro cúbico de agregados en ríos a los precios actuales.


Cuadro 1.

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Demanda de cemento portland gris tipo 1.
(Millones de fundas de 42.5 kilogramos.

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Año Millones de fundas.

1970 11 Millones
1980 29 Millones
1990 32 Millones
2000 79 Millones

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Fuente: Codia, R. Osiris de León. 2000.


La industria de agregados en R.D. Para conversar se necesitan dos.

El problema está planteado. Hay que encontrarle soluciones prácticas y económicas que lo puedan superar para siempre, sin perjuicio de las empresas y con una visión de desarrollo sostenible para el país. "Con la situación de deterioro en que se encuentran los valles fluviales de nuestro país y la problemática de la explotación de los agregados que contribuye junto a la deforestación a la pérdida de los recursos de agua superficial y subterránea,
existe la tendencia de adoptar soluciones drásticas que consisten en cerrar las operaciones de extracción en las cuencas fluviales. Sin embargo, debemos admitir siendo honestos que estas decisiones así implementadas han contribuido a generar procesos de corrupción para permitir las extracciones de agregados a espaldas de tales prohibiciones. La razón de esto es que no existe una conciencia e información técnica y científica del problema que se ha generado, lo cual contribuye a no respetar este tipo de medidas restrictivas, ya que adicionalmente a la ignorancia que implica esta falta de conciencia, siempre se argumenta la problemática real que se genera en la industria de la construcción cuando no se cuenta con un suministro suficiente de agregados para ese sector económico". (Llinás: 1999).

16 Mil kilómetros cuadrados de piedras calizas.

Lo cierto es que R.D. cuenta con 16 mil kilómetros cuadrados de piedras calizas en toda la geografía nacional, de acuerdo al Ing. R. Osiris de León. Existen en total 25 fuentes alternativas para comenzar a resolver de forma
definitiva este problema que nos afecta a todos. Ellas son:
1) Gravas y arenas de las antiguas terrazas fluviales de Cambelén, al suroeste de Haina, las que hoy son explotadas por diferentes empresas.

2) Gravas y arenas de las antiguas terrazas fluviales de Palo Amarillo, al sur de Santiago de los Caballeros, también explotadas por varias empresas.

3) Gravas y arena de las antiguas terrazas fluviales de Jánico Pedregal.

4) Gravas y arenas de las antiguas terrazas fluviales de Las Matas de Farfán.

5) Gravas y arenas de las antiguas terrazas fluviales de Azua- Villarpando.

6) Gravas y arenas de las antiguas terrazas fluviales y abanicos aluviales de la franja Villa González-Navarrete, actualmente en explotación menor.

7) Abanicos aluviales de la franja Galván-Neiba.

8) Abanicos aluviales de La Descubierta-Jimaní.

9) Abanicos aluviales de Los Saladillos-CAbral-Barahona.

10)Abanicos aluviales de Puerto Alejandro-El Curro. Ya evaluados.

11)Abanicos Aluviales de Las Charcas de María Nova, en San Juan de la Maguana.

12) Depósitos aluviales de las colas de las presas de Valdesia, Tavera, Sabana Yegua, Hatillo y otras.

13) Piedra caliza de Cabo Rojo, Pedernales, actualmente en explotación.

14)Piedra caliza de El Pomier, San Cristóbal, actualmente en explotación.

15)Piedra caliza de Bávaro, actualmente en explotación.

16) Piedra caliza de La Romana, actualmente en explotación.

17) Lutitas de Hato Mayor, actualmente en explotación.

18) Piedra caliza de Boca Chica, actualmente en explotación.

19) Piedra caliza de Punta Cana-Juanillo, en proceso de explotación.

20) Piedra Caliza de Samaná-Talanquera.

21) Piedra Caliza de Río San Juan.

22) Piedra Caliza de Yuvina, Bayaguana.

23) Basaltos de Hato Nuevo, Villa Altagracia, al oeste del Distrito Nacional.

24) Basaltos de Yamasá-Monte Plata.

25) Escorias de Falconbridge Dominicana, utilizadas en la construcción de la nueva autopista Duarte.

Exportamos piedra caliza a los Estados Unidos.

R.D exporta piedra caliza hacia los Estados Unidos. Eso indica que cumple con todos los estándares de calidad exigidos por un mercado que podría ser considerado como el más exigente en cuando a calidad se refiere. En este listado no se incluyen las rocas graníticas por sus altos contenidos de sílice en forma de cristales de cuarzo, lo que incrementa la abrasividad del material y consecuentemente el desgaste de los equipos de carguío, trituración y clasificación, concentrando el listado en materiales aluviales sueltos, rocas sedimentarias de probada calidad o rocas ígneas básicas.

Opinión del equipo ambiental de la Academia de Ciencias de R.D.

En carta dirigida al ex-Presidente Dr. Leonel Fernández, atendiendo a la solicitud del mismo, la Academia de Ciencias opinó lo siguiente: "En atención a la solicitud expresada por Ud. en la reunión sostenida el sábado 15 de abril del presente año, en la ciudad de San Cristóbal, le estamos entregando una relación parcial de las fuentes alternativas para la extracción de materiales granulares de construcción". Esas fuentes alternativas son las 25 opciones que
en gran propuso el Ing. R. Osiris de León, ya recogidas en este documento."

La explotación de materiales del lecho, orillas y terrazas de los ríos, constituye una actividad que debe y puede ser definitivamente abandonada. El costo ambiental, económico y social de tales prácticas supera significativamente los beneficios que genera. El impacto negativo de esta actividad se verifica en el marco de la degradación de las cuencas, la destrucción de los sistemas boscosos en los nacientes, el uso de los lechos como vertederos, la contaminación excesiva de las aguas superficiales y uso de las aguas confinadas.

Modernizar el sector de agregados.

Es preciso modernizar el sector de agregados, de tal forma que este cumpla su importante papel social sin condenar a los dominicanos de hoy y de mañana a morir de sed y hambre. Saludamos la decisión de suspender las extracciones de los ríos Nigua, Nizao y Yubazo, aunque consideramos que esta medida debe alcanzar a todos los ríos del país. Los 136 ríos intervenidos para
la extracción de agregados deben ser protegidos para siempre.".(Academia de Ciencias: abril del 2000).

Como es sabido el planteamiento de la Academia de Ciencias fue desestimado por el Dr. Leonel Fernández e igual que siempre, las granceras continúan con la explotación de los agregados de los lechos de los ríos.

En vista de los daños provocados por las extracciones de agregados, la Academia de Ciencias de R.D. elaboró, junto a la Cámara de Diputados, un Proyecto de ley de extracción de áridos o materiales de construcción (arenas, gravas, gravillas y rocas) con su respectivo Reglamento, los cuales fueron ya enviados al Senado de la República y a la Cámara de Diputados para su conocimiento y aprobación correspondiente.

Daños provocados por las extracciones de agregados según la Academia de Ciencias de R.D.

• Sobreexplotación del cauce y las márgenes de los ríos.
• Rotura de la pendiente de equilibrio del río.
• Ramificación del cauce con lo que aumenta la evaporación y los niveles de infiltración hacia el acuífero.
• Contaminación de las aguas superficiales y subterráneas con lubricantes y combustibles.
• Incremento de la cantidad de sólidos en suspensión, limitando el aprovechamiento de las aguas en la zona aguas abajo de la explotación.
• Depresión del nivel freático en las tierras aledañas.
• Erosión de las tierras agrícolas en los predios adyacentes.
• Modificación de la dinámica hidrológica (estiajes más pronunciados, avenidas incontroladas, desbordes e intermitencia).
• Daños a infraestructuras por los efectos de la erosión remontante del río (carreteras y caminos, muros, embalses y contraembalses, puentes y edificaciones).
• Pérdida de la vegetación que protege los ríos y garantiza estabilidad biológica.
• Desaparición de la fauna, tanto terrestre como acuática.
• Disminución de la calidad de vida de la población, aumento del desempleo y la migración al perderse la actividad agropecuaria y pesquera.

Si sumamos los costos de todos estos factores ambientales, no hay ninguna duda que la industria de agregados en el lecho de los ríos es una actividad demasiado antieconómica y terriblemente nociva al interés nacional, que afecta ya el presente de la industria de la construcción y el futuro del factor agua en nuestro país.

Soluciones para proteger nuestros ríos

“La solución consiste en lograr que los industriales que extraen agregados de los ríos, exploten canteras de rocas en forma competitiva económicamente, cuando se las compare con el costo de explotación de los cauces fluviales; para esto debe considerarse el costo del deterioro ambiental e introducirlo en los costos operacionales de la extracción de las cuencas fluviales”.
(Ing. Romeo Llinás).