Padre Las Casas.- “La corrupción está arropando al país y arruinando al campo, y la agricultura familiar generadora de la mayor parte de los alimentos que consumen los dominicanos está a punto de desaparecer”, denunció el ingeniero agrónomo Arístides Santana Reyes, coordinador general del Centro de Estudios y Promoción Social (CEPROS).
Al mismo tiempo, Santana Reyes reclamó de las autoridades gubernamentales más atención para los campesinos de la región de Padre Las Casas debido a las precarias condiciones de vida en que se encuentran.
En un acto con el que se celebró el 40 aniversario de la fundación del CEPROS, el educador popular señaló que problemas que se suponía debían estar resueltos para esta época como la atención en salud, la educación de calidad, la inclusión de los campesinos en la seguridad social, disposición de viviendas y de agua potable para cada una de las familias de la zona rural, aún persisten como en el 1978, fecha en la que se fundó la institución.
El acceso a tierra de riego y al financiamiento agrícola para pequeños y medianos productores del campo en la zona de Padre Las Casas es casi nulo, enfatizó.
El profesional agrícola expresó igualmente que el modelo de crecimiento económico con injusticia social que prevalece en el país ha frenado el desarrollo social e impedido el bienestar de la mayoría de la población.
Tras señalar que el CEPROS no puede quedarse callado ante la situación que vive el país, criticó la extensión de la corrupción precisando que “las leyes contra los ladrones son solo contra los pobres”.
Por otra parte, advirtió a los campesinos que desarrollan la agricultura familiar, responsables de la comida que llega al pueblo, que están amenazados de desaparecer debido a que existen sectores que no quieren a los agricultores chiquitos y a quienes solo les interesa la agricultura millonaria para la exportación, con el objetivo de llevar sus productos a otros países.
Entre los proyectos impulsados por la organización para beneficio de las asociaciones se cuenta un programa ganadero rotativo de más de 550 vacas, que ha permitido que miles de personas pobres dispongan de una vaca; así como la reforestación de cientos de tareas de terreno en áreas montañosas con irrigación por tuberías.
De su parte, Max Puig, invitado especial y miembro fundador del CEPROS, hizo un recuento de los primeros años de la institución resaltando su apoyo a la educación y la formación de líderes sociales del movimiento campesino, hecho que le ha permitido mantenerse como un movimiento solidario, clasista, reivindicativo e independiente.
“Lo importante es que durante los últimos cuarenta años se han logrado parte de los objetivos propuestos inicialmente: los campesinos de la región están organizados, tienen mejores niveles de formación y conciencia, y han logrado mejorar parcialmente sus condiciones de vida a través de su lucha y esfuerzo”, subrayó el sociólogo y político, fundador y promotor de varias organizaciones sociales.
CEPROS es una institución de educación popular que fomenta la organización campesina y los grupos sociales en procura de concientizar a la gente para el desarrollo comunitario y la libertad plena, partiendo de la unidad productiva.
El acto, celebrado en las instalaciones de CEPROS, en el Barrio Buena Vista de Padre Las Casas, contó con la participación de cientos de líderes campesinos de la región sur y fue encabezado por la directiva de la Coordinadora de Juntas de Asociaciones Campesinas.
Asistieron igualmente al evento las autoridades municipales de Padre Las Casas, que otorgaron un certificado de reconocimiento al CEPROS, así como representantes de instituciones públicas y privadas.
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