La frontera genera riquezas para dejar atrás la pobreza, afirma ONG

La Red Fronteriza Jano Siksé (RFJS) para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, afirmó hoy que las provincias dominicanas fronterizas con Haití generan recursos económicos suficientes como para salir de la pobreza en que se encuentran actualmente. 

"Generamos anualmente más de 1.320 millones de dólares producto de los mercados fronterizos. Parte de esos fondos podrían utilizarse para afrontar los altos niveles de pobreza en que se encuentran Pedernales, Independencia, Dajabón y Elías Piña", según la nota difundida por la ONG.

Prueba de ello, agregó la ONG, es que las comunidades fronterizas tienen los mayores índices de pobreza del país: Dajabón, 56,2 por ciento; Elías Piña, 82,4 por ciento; Independencia, 70,2 por ciento y Pedernales 60,5 por ciento. En total, hay 31.738 hogares pobres, de ellos más del 28 por ciento en situación de extrema pobreza, en una zona fronteriza donde operan mercados por los que se mueven 1.320 millones de dólares anuales, recordó.

Con una mayor inversión en las comunidades de Dajabón, Elías Piña, Independencia y Pedernales, se podría dar el impulso necesario para el desarrollo de estas provincias.

"Ante todo, hay una necesidad urgente de inversión social en estas provincias fronterizas, sin las cuales no se puede producir el desarrollo. Se precisa la mejora de la infraestructura vial entre y desde los puntos de mercado y las poblaciones circundantes, de forma que agilice el traslado y trasporte de las mercancías que se intercambian en los mercados binacionales", según la ONG.

Igualmente y debido a las condiciones de pobreza en la zona, es necesaria una mayor inversión en el acondicionamiento de viviendas, centros educativos y servicios públicos básicos, implementando la Ley de desarrollo fronterizo, agregó la Red Fronteriza Jano Siksé.

Del mismo modo, la ONG resaltó la falta de una normativa clara de regulación de los mercados, de inversión en las provincias en materia de educación, sanidad, viviendas, servicios públicos básicos e infraestructuras que las desarrollen y acaben con el abandono del que son víctimas por parte del Gobierno Dominicano.