Economía y Medio Ambiente

En su libro: Ecología, principios para las relaciones hombre-naturaleza, el Ingeniero forestal Eleuterio Martínez nos dice: En 1935 se utilizó por primera vez el concepto de “Ecosistema " para designar a todas las comunidades vivientes (plantas y animales) de un área específica junto con los elementos no vivientes (aire, agua, luz, espacio físico, tierra, temperatura, nutrientes etc.) del entorno o medio ambiente. El ecosistema es una comunidad de vida formado por cuatro componentes: las plantas, los animales, los microorganismos desintegradores de la materia orgánica y el ambiente o conjunto de factores físicos o no vivientes (temperatura, luz, humedad etc.). Estos cuatro elementos se complementan en un equilibrio que les permite perpetuarse.

El clima influye poderosamente sobre las plantas, los animales, el suelo y el hombre. A su vez, las plantas interactúan con el suelo, con los animales y con el hombre. El suelo se conecta con el clima, las plantas y los animales. Los animales interactúan con el hombre, las plantas y el suelo. El hombre, como productor de bienes y servicios, influye en el clima, en los animales, en las plantas y en el suelo.

Todos, en conjunto, constituyen la unidad fundamental de la vida y se desarrollan en base a leyes que se cumplen con rigorosa exactitud.

No importa el país que sea, los problemas ecológicos son siempre los mismos. Las plantas son la puerta principal de entrada de la energía cósmica. Gracias a la luz solar, las especies vegetales utilizan el agua, los nutrientes del suelo, el bióxido de carbono y otros elementos para realizar la fotosíntesis. De la fotosíntesis depende la producción de alimentos que utilizan todos los seres vivos. Los animales constituyen otro componente de vida de la naturaleza. Su fuente alimenticia proviene de las plantas, directa o indirectamente, y por tal razón ellas son las productoras y los animales los consumidores. Las plantas brindan alimento, refugio y condiciones para la producción, mientras los animales distribuyen la energía (cadenas alimenticias), contribuyen a la distribución geográfica de la flora (son los administradores de la vida vegetal).

Al hombre se le ha permitido todo en la utilización de la naturaleza para alcanzar sus niveles de bienestar. Es un error. No todo puede ser permitido, porque el hombre ha demostrado, como usuario, que es un gran depredador de las plantas, animales, clima, agua y suelo. La hora de la razón ha llegado a nuestras puertas, precisamente porque el hombre a contaminado el ambiente en todo el planeta tierra. Ignorarlo es de tontos.

La deforestación de nuestras montañas, los ríos que se secan, las presas y canales de riego sedimentadas, la salinización de los suelos, las especies vegetales que desaparecen, la fauna que se pierde, los ríos que reciben los desperdicios industriales, la contaminación del aire, las industrias contaminantes, la lluvia ácida, el efecto invernadero, los hoyos de ozono, el smog de invierno, el smog de verano, los ruidos incesantes productores de enfermedades, son un abanico demasiado apreciable para que puedan pasar desapercibidos por la mayoría de la población dominicana.