Algunos teníamos muchas expectativas puesto que este hermoso libro no solo en su contenido literario, sino también de índole histórico y humano tiene como objetivo hacernos pensar, reflexionar ir profundamente en la naturaleza humana a través de los personaje de Hanna y el joven Michael Berg.
La obra nos presenta un adolescente enamorado de una mujer madura, las primeras páginas son de gran contenido erótico y vamos como lectores creciendo junto a Michael y sus sentimientos encontrados. Hanna se nos presenta como un misterio, hasta que descubrimos que su gran tragedia es el de ser analfabeta.
La segunda parte del libro es de gran contenido histórico, el autor nos presenta la tesis de culpa de una generación de alemanes perseguidos por un pasado histórico que no vivieron, pero que siempre está como un fantasma; y no es casualidad que Schilink pertenece a esa generación.
El final en el libro es sublime, doloroso, terrible, habla de compasión, de piedad y de la eterna lucha entre el bien y el mal. Si hacemos todas estas explicaciones es para mostrar una vez mas lo serio y lo difícil que es llevar una adaptación de un excelente libro a la pantalla.
Kate Winslet, hace el papel de Hanna, por el cual obtuvo el oscar a la Mejor actriz (bien merecido), pues es quien salva la película. Realmente ella es la perfecta Hanna, tambien lo demuestra en el final donde acerca su mano a un Ralph Fiennes, en el papel de Michael adulto, en ese instante podríamos decir que la escena va de la mano con el libro. Lo interesante de esta versión del lector para el cine y es lo que defendemos, fue el hecho que motivo a muchos jóvenes y adultos a leer el libro, en este sentido la película cumplió su función.
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