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Desplome de una estructura del siglo XVI

Por Manuel E. Del Monte Urraca
sábado 09 de abril de 2016, 13:21h

Aunque todavía no se ha dicho quien, o quienes, son los responsables de lo ocurrido en el Hotel Francés, lo que sí presumimos es que no fue por obra y gracia de ningún espíritu. No obstante, a mi juicio existen dos posibilidades. Los que intervinieron en los trabajos de restauración, llevados a cabo en el año 1991, y los que están trabajando en los cambios que se están llevando a cabo en las calles de la Ciudad Colonial.

Los primeros, que son varios, pero cuyo peso recae sobre el contratista, y el director de la entonces todavía Oficina de Patrimonio Cultural (OPC), por el hecho de haberse atrevido a realizar cambios extraordinarios en la estructura de la edificación del Siglo XVI, tales como haber sustituido las vigas centenarias de caoba por otras de concreto pretensado, además, haber vaciado una losa de concreto sobre estas en el entrepiso.

Según algunos comentarios emitidos por obreros entendidos en estos menesteres, que trabajaron o presenciaron la ejecución de los trabajos, las vigas de concreto fueron instaladas en los mismos mechinales (huecos) donde se encontraban las vigas de caoba. Lo que de haber sido así, no ofrecían la suficiente seguridad, ya que esta solución requería, entre otras, que se vaciaran sendas vigas de amarre conjuntamente con las vigas pretensadas. Y por qué no, se levantaran algunas columnas de hormigón armado, empotradas en los muros, de acuerdo a la distancia que recorrería la viga de amarre, que contribuyeran a sustentarlas.

Es de sorprender, que el extraordinario sobre peso y empuje de vigas y losa de concreto se mantuviera algún tiempo sin causar daño alguno a la estructura, hasta que ocurriera el lamentable suceso, producido como consecuencia de los trabajos de remodelación de la intersección de las calles Mercedes y Arzobispo Meriño. Lo que ha de constituirse en la segunda causa responsable de lo ocurrido.

Aunque no soy ingeniero civil, ni experto en estructuras, ni nada parecido, me he atrevido a sugerir lo que probablemente sucedió, de manera que las autoridades oficiales, que corresponden a variopintas actividades, desconectadas unas de otras, acaben de manifestarse, rindiendo un informe creíble y, que de conocerse el o los culpables, sean condenados por una justicia diáfana, aunque solo sea para que con ello se empiece a ponerle orden a la institucionalidad existente en el gobierno, y se eviten otros posibles errores, e incompetencias profesionales en las distintas áreas de actuación.

En lo que tiene que ver con los primeros supuestos responsables, se debería comprobar lo de las vigas, y los mechinales que todavía se mantienen sin habérseles puesto las manos, ya que los del otro lado desaparecieron con el desplome del muro sustentador, así como lo concerniente a la losa de concreto. Ambas, vigas y losa que aparecieron en los escombros, y que podemos ver en la infinidad de fotografías tomadas por distintos fotógrafos. Entre los que me encuentro yo.

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Algo que no me es dable dejar de mencionar, si es que pretendo ser justo con mis apreciaciones es, el sobre techo compuesto por viguetas de madera y tejas planas, que fuera colocado por los que intervinieron la edificación por cuenta de la empresa Accor, después que se subscribiera el contrato de administración del Hotel Francés con el Ministerio de Turismo (1997), quienes tuvieron que acometer importantes trabajos de acondicionamiento a la estructura recibida, que fuera víctima de objetables trabajos de restauración, por parte de los que intervinieron la misma en el año 1991.

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Aprovecho la oportunidad para desligarme de dichos trabajos, que como director de la OPC hube de actuar, sencillamente, como asesor, hasta dejar mi posición en el año 1998.

En cuanto a la segunda, es de esperarse que los resultados de las investigaciones, que supuestamente se han estado haciendo, resta saber si el acercamiento de los equipos mecánicos empleados, irresponsablemente, a los cimientos y muros de la edificación, o las vibraciones producidas por estos, fueron, conjuntamente con los primeros responsables, los causantes de la desgracia.

Continuaremos esperando.

A continuación una relación de los que participaron en los trabajos de 1991, bajo la responsabilidad de la Oficina de Patrimonio Cultural (OPC), que apareciera publicada en la Revista ARQUITEXTO (Edición 15)

http://arquitexto.com/2015/05/el-hotel-frances-en-la-ciudad-colonial-edicion-15/

HOTEL FRANCÉS
Santo Domingo

EQUIPO PROFESIONAL
Constructora Morales, S.A.

CONTRATISTA GENERAL
Arq. Ligia Calero Chavier

RESTAURACION Y DISEÑO ARQUITECTONICO
Ing. Iván Morales Cuello

CONTRATISTA Y DIRECCION GENERAL
Arq. Alberto Vásquez

LEVANTAMIENTO Y DIBUJO
Arq. José Batlle Pérez

ARQUEOLOGÍA
Arqueólogo Francisco Coste

AIRE ACONDICIONADO
Airmaster, S.A.

DISEÑO ELÉCTRICO
Bensa, S.A.

COLABORADORES
Arq. Esteban Prieto
María Ugarte
Paul Morales Cuello

OFICINA SUPERVISORA DE OBRAS DEL ESTADO
Ing. Juan López
Que tinglado, carajo.

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