Santo
Domingo.- El proyecto para la readecuación de La
Barquita y entornos se embarca en la difícil tarea de reubicar los residentes
de esta zona, con el propósito de proveerles no solo de una vivienda digna,
sino también de una mejor calidad de vida.
Las
familias que participaron en el Taller Formación Hacia la Nueva Barquita,
fueron orientadas durante tres meses, en dos sesiones semanales de dos horas
cada una, para un total de 16 encuentros, siendo la primera vez que estas
familias dedican tantas horas a una actividad de este tipo.
El
acto de graduación inicio con las notas del Himno Nacional y fue presidido por los señores José Miguel
González, director de la Unidad Ejecutora para la Readecuación de la
Barquita; Patricia Cuevas, coordinadora,
y Gisela Mejía, encargada de Formación Ciudadana, quien hizo una breve
descripción del taller.
"Se trata de
unos encuentros de formación, con metodología experiencial, en los que
participa todo el núcleo familiar, organizados en grupos cuyo número mayor de
participantes es 30 familias, unas 6 familias por grupo", explicó.
Dijo que le
objetivo de esta capacitación es desarrollar un proceso integral de aprendizaje
social sostenible para las familias de La Barquita, que les habilite con los
hábitos y conductas que les permitan la
sana convivencia al reubicarse en la Nueva Barquita.
Manifestó que
para ello se desarrolla un proceso de aprendizaje social integral, individual y
grupal, para que estas familias aprendan
nuevos estilos de comportamiento ciudadano responsable, una cultura de sana
convivencia, compromiso comunitario, como usar las viviendas adecuadamente y sostenibilidad de los valores, entre otros aspectos.
Gisela Mejía refirió
que se nota el avance y el logro de lo que se buscaba con estos talleres, ya
que en la comunidad de La Barquita han bajado los niveles de conflictos
interpersonales, la violencia intrafamiliar y se evidencia un mayor compromiso
con la protección de los niños, niñas, adolescentes y jóvenes, así como el
respeto a los derecho y deberes de todos y todas.
Mientras que el
señor José Miguel González, por su parte, manifestó que La Barquita es un proyecto de
transformación humana que tiene la responsabilidad de formar a cada miembro de
las familias del sector, habilitándoles y proporcionándoles herramientas de
habilidades sociales y alfabetización cívica necesarias para la sana
convivencia y su adaptación en lo que será su nueva realidad urbana y social.
"Cuando
el Presidente de la República, Lic. Danilo Medina, me designó para ser parte de
este proyecto e iniciamos las visitas a la antigua Barquita, nos hicimos
consciente de que esta iniciativa sobrepasaba el aspecto de intervención física
de una zona de alta vulnerabilidad. Nos
hicimos conscientes de que estábamos frente a un reto mayor donde el eje
principal son los seres humanos que por décadas han vivido en situaciones
extrema de riesgo", agregó.