¿En qué persona te quieres convertir?

A muy pocos días para que termine este año mi pregunta es: ¿En qué persona te quieres convertir? ¿Vas a seguir siendo la misma persona, haciendo lo mismo y esperando resultados diferentes? La vida es muy corta y dedicamos muy poco tiempo en definir cuál es nuestra misión personal. Tu misión personal es el mapa que te ayudará a conquistar tu destino. Es lo que te ayuda a identificar ¿Dónde estás hoy y a dónde te gustaría llegar?. Para desarrollar nuestra misión personal tienes que saber quién eres. ¿Por qué estas en este mundo?, ¿A dónde deseas llegar? Te recomiendo que medites reflexiones, incluso pregúntale a Dios estas preguntas porque muchas veces vivimos toda una vida y no las podemos contestar.

Si te preguntara: ¿quién tú crees que eres? Imagino que te quedarás pensando y muchas veces no sabrías ni cómo contestar. Te puedo decir que eres una obra maestra, entre los habitantes que existen en este planeta no hay una foto copia tuya. Entonces eres un original. Nunca ha habido nadie como tú y nunca más lo abra. Desde el vientre de tu madre se desarrollo tu ADN que fue programado para tener éxito. Existe un principio de programación divino que no se pude cambiar. Tienes las instrucciones para crecer, desarrollarte, e impactar vidas. Es similar a la semilla que siembras y no tienes que irle hablar para que crezca y se desarrolle. Sencillamente esa semilla está programada para crecer, desarrollarse y dar frutos. Es vital reconocer tu verdadera identidad, para poder desarrollar tu potencial.
Después de hacerte tantas preguntas, te vuelvo a preguntar: ¿En qué persona te quieres convertir? Necesitamos tener un sentido de propósito, esto nos hace sentir útil, nos confirma que nuestra vida tiene significado. Cuando tienes un propósito, una misión y una visión esto se convierte en el mapa que te dirigirá para vivir una vida con significado y a la misma vez provoca que las cosas sucedan. Dentro de ti hay una semilla de esperanza, de confianza, de determinación y de firmeza que refleja con exactitud cuáles son tus valores, tus prioridades y los principios que dirigen tu vida.

Cuando defines tu misión, te conviertes en una persona más creativa, más vigorosa y más apasionada. Esto te confirma el propósito para qué naciste y cuál es el legado que vas a dejar en este mundo, para que sea uno mucho mejor. Dios quiere utilizarte para influenciar, sanar e inspirar a otros a que redescubran su propósito.

Cuando define tu propósito está encaminado a redescubrir tus dones, tus talentos y tus habilidades. Despierta tus áreas de interés e identifica las actividades más atractivas, las que más disfrutas; son el mejor indicador, que has descubierto tus talentos y tus capacidades. Te convierte en un experto, en un modelo, en un Facilitador. Donde disfrutas lo que estás haciendo y encuentras qué es lo que mejor haces. La excelencia es inevitable porque estas utilizando a todo vapor tus habilidades. Amas lo que haces y estas enfocado en tus mejores virtudes. Esto hace que tus puntos débiles se vuelvan irrelevantes. Conocemos una persona que ha descubierto su misión porque su comportamiento y su energía refleja una pasión contagiosa, trasmite la convicción que lo que está haciendo le produce felicidad y tiene claro que persona es y a dónde quiere llegar.

Hoy te invito a definir tu misión personal, esta es una descripción que expresa tu propósito en la vida, que te inspira a definir la dirección que hay que tomar y especifica lo que estás dispuesto hacer para convertirte en la persona que tu aspira.