No pierdas las esperanzas

No existe mejor medicina que la Esperanza, tónico más poderoso de creer que todos los problemas tienen una solución. La capacidad de tener esperanza nos permite enfrentar los problemas de la vida diaria. Nos recuerda que, ocurra lo que ocurra, siempre prevaleceremos. Lamentablemente las frustraciones de la vida impiden que las personas puedan tener esperanza. Le impide pensar que hay un mejor mañana; Limita la confianza en poder generar soluciones. Lastima el compromiso para asumir responsabilidad y ver que el mundo no se ha terminado. Opaca la visión de poder ver más allá de la adversidad y superarla.

Las experiencias nos confirman que la vida tiene momentos felices y momentos dolorosos. Nos tocan vivir situaciones de abundancia y situaciones de escasez. Hay tiempos para celebrar y tiempos de llorar, momentos que nos sentimos que podemos con el mundo y a veces hay días que se nos hace difícil vivir con ese mundo.

Creo que es tiempo que reconozca que eres el arquitecto y el diseñador de tu futuro. Hoy puede ser el día, ¡el día que vas a marcar tu vida! Si hoy decidiste que vas hacer la diferencia, que te llenaras de esperanza y saldrás de ese estancamiento emocional de frustración que no te deja echar hacia adelante, ¡te felicito! Hoy tu estas decidido a alcanzar el éxito que tanto has soñado. Quiero decirte que las personas que deciden triunfar no se enfocan en sus fracasos, si, en sus victorias. Su propósito es servir, ayudar a otros. No es posible recibir sin antes dar. La clave es dar, es compartir, es ser más creativo, entusiasta y confiado. La clave es creer, es tener fe, es saber identificar las oportunidades que vienen de camino antes que lleguen. Es tener un sueño, convertir lo invisible en visible, lo difícil en fácil y lo imposible en posible.

Comencemos hoy a enfocarnos en las bendiciones que poseemos, la abundancia que nos rodea, la libertad que disfrutamos, la gente buena que nos respeta y nos ama, la salud que tenemos y lo mucho que falta por hacer. No te enfoques en las veces que lo has intentado y no ha resultado, enfócate en todo lo que has aprendido, enfócate en tus talentos, en los dones que Dios te ha dado.

Aprende a desactivar los pensamientos de inseguridad, duda y miedo porque paralizan y atan tu confianza, tu creatividad y determinación. Tienes frente a ti un lienzo donde puedes plasmar la pintura más exquisita que refleje el propósito que Dios tiene para tu vida. Cuentas con veinte ocho letras en el abecedario. Que las puedes utilizar para escribir tu historia de éxito en una forma vibrante y excitante como nunca antes se haya escrito. Cuentas con ocho mil setecientos sesenta horas al año, para invertirla en conquistar el éxito que tienes derecho a conquistar. No te enfoques en el problema, ni en la enfermedad, ni en la depresión y menos en los miedos. La vida es un viaje donde todos los días estamos aprendiendo, y cuando aprendo crezco, y cuando crezco maduro y disfruto la vida. Hoy es un buen día para desarrollar esperanza, para retomar esos sueños y cumplirlos. Nunca permitas que tu pasado determine tu futuro. No dejes que las circunstancias te detengan, tampoco dejes que las excusas gobiernen tu vida.

Cíñete de valor, de confianza, de coraje y demuéstrale al mundo que tu puedes! Tienes el Espíritu Santo de Dios dentro de ti, siéntelo, créelo y despierta ese gigante que hay en ti. Llénate de esperanza y comienza a conquistar lo que te pertenece.