Declaración sobre discurso Danilo 27.02.16

En el reciente discurso de “rendición de cuentas” (?) el Presidente Medina se expresó 42 veces en singular de primera persona:

5 veces “YO”

6 veces “MI”

9 veces “HE”

22 veces “ME”

1. Sus informaciones fiscales se limitaron a temas burocráticos y metodológicos – cuentas cerradas, duplicidades, mejoramiento de la formulación y seguimiento presupuestaria, etc.- Nada dijo de los resultados fiscales de su gestión caracterizada por el consumo de todas las recaudaciones pagadas por los contribuyentes en cargas fijas y la consecuente continuación a la dependencia financiera del endeudamiento que esto genera; sin tener en cuenta que ese proceder nos está llevando por el camino de otros territorios que están sufriendo calamidades tales que han llegado a argumentarse como crisis humanitaria (casos recientes: Puerto Rico y Grecia).

2. Las cuentas que rindió se limitaron a reportar montos cuantitativos gastados sin referirse a resultados cualitativos. ¿De qué vale la tanda extendida si solo sirve para que los estudiantes pasen el tiempo, sin educarse en artes, deportes, manualidades, cívica, etc.? ¿De qué sirve la alfabetización si solo sirve para firmar su nombre?: ¿De que sirven tantas inversiones educativas si la deserción escolar aumenta y el costo de la educación para las familias es lo más caro? ¿De qué sirven las tarjetas SENASA si no las aceptan los centros médicos? ¿De qué sirve inversiones hospitalarias si no hay oxígeno en el Cabral y Báez? De que sirven tanto dinero gastado en visitas sorpresas si la agropecuaria está estancada y se produce menos que antes? ¿De qué sirven tantas inversiones viales si hay más taponamientos en el tráfico?

3. El Presidente recurre a dictámenes judiciales e internacionales cuando le conviene y omite cuando no le conviene, violando el equilibrio en la balanza contenido en el símbolo de la justicia. Se jacta del dictamen sobre Bahía de las Águilas pero sobresee otras sentencias judiciales que consagran la impunidad así como la descomposición dentro de las procuradurías fiscales, que son de la competencia del poder ejecutivo como la corrupción de fiscales y expedientes mal documentados y procesados. Pasó por alto expedientes expresamente mal instrumentados para provocar descargos en los tribunales. Cita el progreso metodológico presupuestario, índice de competitividad, y el “doing bussines” pero sobresee la sentencia del Foro Económico Mundial que nos sitúa en el penúltimo territorio en calidad y costo del servicio eléctrico así como en ciencias y matemáticas. Tampoco se refiere a los pésimos calificativos en los indicadores internacionales sobre la corrupción hoy coronados con escándalos internacionales girando alrededor del financiamiento, construcción y asesoramientos provenientes de Brasil.

4. El Presidente Medina dedica gran parte de su discurso para acusar al pueblo dominicano de pesimista, olvidando la sentencia del dramaturgo español Antonio Gala que un pesimista es un “optimista bien informado” y divorciándose de la admonición del Presidente de su partido, Leonel Fernández que utilizó la alusión a un vaso de agua por mitad: Que un optimista lo ve medio lleno mientras que un pesimista lo ve medio vacío.

5. El Presidente Medina testimonia la sentencia de Unamuno quien advirtió la mediocridad de quienes “para el presente en el que todo el pasado es prehistoria”. En su discurso, nada de lo que hicieron sus predecesores, incluyendo los gobiernos de los partidos en el que él se desempeñó como Secretario de la Presidencia tuvo mérito. En cambio, todo lo bueno lo ha hecho él y todo lo hecho por él es meritorio.

6. Ya hemos dicho que el Presidente utilizó manifestada. Utilizó la primera persona en singular – “yo”, “he”, “mi”, “me” - 42 veces. Repitió varias veces que él conoce los problemas, que sabe lo que está haciendo, pidió confianza a él, etc. Presentó como un logro personal de él lo que es una obligación inexcusable del Estado que preside. Se apropia de logros de toda la economía dominicana, como el número de empleos creados, cuando del desempleo se mantiene al mismo nivel del año 2000 con lo cual apenas se está absorbiendo el incremento de la población económicamente activa producto de la evolución natural de la economía.
7. El Presidente Medina abusa de la memoria e inteligencia del pueblo dominicano. Olvidó que él había prometido que llegaría a 10 millones de turistas y solo reportó 6.5 millones. Olvidó que prometió resolver “definitivamente” el problema eléctrico y ahora apenas anuncia que los equipos dela cuestionadas plantas en Punta Catalina quedarán instalados sin precisar fecha de entrada en operación. Mencionó que el Pacto Eléctrico estaba a punto de ser firmado olvidando que en circunstancias similares su gobierno hizo abortar el pacto fiscal. Cita como un logro la renegociación con PETROCARIBE al adquirir una deuda que era de Estado a Estado por la mitad de su valor omitiendo que la sustituyó por un acreedor privado más exigente que cobran intereses 5 veces más caros.

8. El Presidente confirmó la confusión conceptual de su gobierno. Confundió la superación de la pobreza alcanzable solamente mediante con la creación de puestos trabajos a un ritmo superior al crecimiento de la Población Económicamente Activa, con la mitigación de la misma a través de programas sociales financiados internacionalmente, no con recursos propios del Estado. Presentó la formalización como un logro cuando su gobierno ha estimulado la informalidad por su inadecuada política de gastos, sobrecargas tributarias, discrecionalidades aduanales e impunidad ante la corrupción de cuello blanco. Ofreció estadísticas relacionadas con la seguridad que contradicen la percepción ciudadana reflejada en las encuestas, basándose en estadísticas muchas veces caracterizadas por la omisión originadas en el temor de reportar casos.

9. El Presidente Medina evidenció el “focalismo” criticable de su gobierno caracterizado por beneficiar determinados entornos inmediatos sin ponderar el efecto en el Bien Común. Las visitas sorpresas benefician los visitados al recibir tasas bajas de interés mientras que el resto no visitado tiene que pagar altas tasas estimuladas por el propio gobierno para captar recursos y suplir sus déficits. La tanda extendida beneficia los matriculados en ellas pero desplaza las otras escuelas que funcionaban en el horario cercenado. Las inversiones en transporte benefician el entorno de las obras pero trasladan los taponamientos a otros emplazamientos.

Por estas razones, no entendemos como el Presidente Medina visualiza que la nación está siendo de revolución o transformación alguna que la asemejarían al cuento infantil sobre ALICIA EN EL PAIS DE LAS MARAVILLAS o a la serie televisiva sobre LA ISLA DE LA FANTASÍA.