Ciudad del Vaticano.- La preocupación del papa León XIV por la situación en Haití fue evidente al solicitar la liberación inmediata de los rehenes y un apoyo concreto de la comunidad internacional para que los haitianos puedan vivir en paz.
Este llamado se realizó al final del rezo dominical del ángelus, ante cientos de personas reunidas en la Plaza de San Pedro. "La situación del pueblo haitiano es cada vez más desesperada. Hay noticias de asesinatos, violencia de todo tipo, trata de personas, homicidios de todo tipo y secuestros", expresó el pontífice estadounidense desde la ventana del palacio pontificio.
León XIV hizo un fuerte llamado "a todos los responsables para que liberen inmediatamente a los rehenes" y también pidió "el apoyo concreto de la comunidad internacional para crear las condiciones sociales e institucionales que permitan a los haitianos vivir en paz".
Recientemente, la archidiócesis de Puerto Príncipe condenó "con vehemencia" el secuestro de ocho personas, incluyendo un niño y una misionera irlandesa, ocurrido el domingo pasado en el orfanato Sainte-Helene de Kenscoff. Este hecho fue calificado como "nuevo acto de barbarie" e "ignominioso".
En un comunicado, la archidiócesis destacó que se trata de "una señal más, entre tantas otras, del colapso moral, del fracaso del Estado y de una sociedad que está perdiendo el sentido de la vida y la dignidad humana", expresando haber recibido esta noticia con "profunda tristeza" y "gran indignación".