Santo Domingo.- La pieza se destaca por su impresionante vestuario, moderna escenografía, voces de ensueño y actuaciones muy acertadas a cargo de nuevos talentos de la escena del Teatro Musical dominicano. Sobresalen de manera especial la joven Valeria Dávila, quién con tan solo 17 años de edad asume el rol protagónico del musical transmitiendo con sus precisos movimientos y notas musicales la energía y dulzura de tan emblemático personaje.
Le sigue Guille Martin quien con su voz e histrionismo da vida a Dimitry, un joven que junto a Vlad, interpretado por Enrique Valdez, empresario dominicano, que sorprende con sus habilidades actorales y vocales, hacen pasar a la joven por la gran duquesa Anastasia.
La veterana Gracielina Olivero nos da en esta ocasión un masterclass desdoblándose en escena como nunca antes en el papel de la Emperatriz Viuda, quién junto a Laura Rivera, en su cómico y bien acertado rol de Lily, la Dama de Compañía de la Emperatriz, crean un binomio perfecto entre el drama y la comedia.
Roger Manzano una vez más hace galasde su poderosa presencia escénica y fortaleza al actuar en él papel de Gleb, la actuación especial de Jenny Blanco y Bo Luna como los zares de Rusia, impresiona con su parecido físico a los personajes de la vida real y un grupo maravilloso de 16 jóvenes, todos ellos artistas completos, coronan el elenco de tan maravillosa puesta en escena.
Resaltamos la iluminación y él sonido de LUXART, él trabajo vocal de Ameris Cepeda y la delicada confección del vestuario por Magdalena Gutiérrez.