Los doce sitios históricos aparecen en el calendario 2020 de la institución e incluyen en Edificio Armenteros, el Puente sobre Rio Camú y el Hotel Hispaniola, antiguo Hotel Paz.
Santo Domingo.- El Comité Dominicano del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS) presentó la lista de doce monumentos y sitios del patrimonio cultural dominicano en peligro de cara al 2020.
ICOMOS denunció los sitios históricos y monumentos patrimoniales en peligro son:
El licenciado Edwin Espinal Hernández, presidente de la entidad, resalta que entre los lugares históricos en peligro está el Centro de los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo, conjunto de edificios conocidos popularmente como “La feria” y que fueran diseñados por el arquitecto Guillermo González, construido en la era de Trujillo, con los que la dictatura trujillista celebró sus 25 años en el poder y cuya construcción empezó en el 1954 y concluyó en el 1955.
Espinal Hernández sostuvo que las doce imágenes se han integrado en el calendario 2020, como permanente recordatorio de los numerosos factores que inciden negativamente en su conservación y puesta en valor.
De acuerdo a ICOMOS, esos dos lugares están afectados por el abandono, vandalismo, fenómenos naturales, ocupaciones ilegales, la falta de mantenimiento, la ausencia de vigilancia y reparaciones, un deterioro avanzado, que los conduce hacia ruinas y escombros, además de ser objeto de intervenciones inadecuadas, erosión, con el peligro del colapso en algunos casos y en todos los casos se manifiesta la falta de gestión efectiva de estos bienes culturales.
Revisarla legislación
ICOMOS hace suyo el llamado del Tribunal Constitucional, en el sentido de revisar y actualizar de manera integral la normativa que versa sobre el patrimonio cultural de la nación, desde los parámetros y criterios vigentes para que un bien pertenezca a esta categoría hasta el establecimiento de manera inequívoca de posibles alternativas de uso para que los propietarios de inmuebles patrimoniales puedan aprovechar sus bienes, en el sentido de obtener una utilidad económica, aun en presencia de las limitaciones que impone su declaratoria como patrimonio cultural y la función social que de ella se desprende.
“Deben desarrollarse actividades que resulten paliativos del deterioro del patrimonio cultural construido y que contribuyan a crear conciencia en la ciudadanía sobre su valor, al tiempo que es necesario promover el uso de inmuebles patrimoniales abandonados, en razón de que la falta de uso acelera su deterioro”, expresó.
Aspiró a que el Ministerio de Cultura, en tanto autoridad competente para la preservación y protección del patrimonio cultural de la nación, tangible e intangible, y para el fomento de su conservación, rehabilitación y divulgación, haga suyas esas propuestas y asuma, a partir de ellas, la lista de monumentos y sitios del patrimonio cultural dominicano en peligro.