El mandatario abrió el esperado discurso repitiendo muchas de las cosas que dice durante sus intervenciones públicas casi diarias: atacó a los inmigrantes y al Gobierno de su predecesor, Joe Biden, y aseguró que en unos pocos meses EE.UU. ha «ido de lo peor a lo mejor» gracias a sus deportaciones, al cierre estricto de la frontera o al uso de los aranceles contra otros países.
Según Trump, los once primeros meses de su segundo mandato han traído los mayores «cambios positivos» de la historia y subrayó que «los salarios están subiendo más rápido que la inflación». Asegura así que, las nóminas en EEUU vienen subiendo a un ritmo en torno al 4% este año, por debajo del incremento en los precios, que se sitúa más o menos en el 3 %.
Sin embargo, esa diferencia marginal no alcanza a parte importante de la población estadounidense, cuyos bolsillos se resienten más y más con una inflación que principalmente viene dada, según la Reserva Federal, por los aranceles que Trump decidió implementar en abril pasado.
Esto hace que las encuestas muestren la menor tasa de aprobación para Trump desde que retornó a la Casa Blanca, con Gallup situando el porcentaje de estadounidenses que aprueban su labor en un 36 %, solo dos puntos por encima del mínimo que registró en su primer mandato, justo después de inflamar al gran número de personas que asaltó el Capitolio en enero de 2021. Otra encuesta de NPR, PBS y la Universidad Marista de Nueva York publicada hoy sitúa su popularidad en el 38 % y muestra un creciente rechazo en grupos que votaron en masa por él en 2024, como los residentes de zonas rurales. Trump además prometió una reforma sanitaria que ponga fin al llamado «Obamacare» y también un nuevo programa para facilitar vivienda asequible.lc