Según Southcom, las fuerzas estadounidenses desplegadas en la región tienen como misión prioritaria “interrumpir el tráfico ilícito de drogas y proteger la patria”, en línea con las directrices del Departamento de Guerra y del presidente Donald Trump. La operación busca eliminar redes de narcoterrorismo en el hemisferio y consolidar una respuesta coordinada ante amenazas que afectan la estabilidad de múltiples países del Caribe y América Latina.
Maniobras de alto nivel en el USS Iwo Jima y Puerto Rico
Los entrenamientos se llevaron a cabo principalmente en el buque de asalto anfibio clase Wasp USS Iwo Jima, actualmente en navegación por aguas caribeñas, y en el Campamento Santiago, ubicado en Puerto Rico. Las maniobras incluyeron:
- Fuego real aéreo: Aviones AV-8B Harrier II del Cuerpo de Marines realizaron ejercicios de munición real, despegando y operando desde la cubierta del USS Iwo Jima.
- Entrenamiento de baterías: Infantes de Marina participaron en prácticas de artillería a bordo del buque, fortaleciendo sus capacidades de respuesta táctica.
- Tiro con fuego real en tierra: Se ejecutaron ejercicios de tiro en campo abierto en Puerto Rico, simulando escenarios de combate terrestre.
- Combate cuerpo a cuerpo: Se impartieron sesiones de artes marciales y técnicas de defensa personal a bordo del USS Iwo Jima, como parte del entrenamiento físico y operativo.
Estas acciones forman parte de una estrategia integral que busca mantener a las fuerzas estadounidenses en estado óptimo de preparación ante posibles amenazas en la región. El Comando Sur enfatizó que los ejercicios no solo fortalecen la capacidad de respuesta inmediata, sino que también consolidan la cooperación militar con aliados regionales.
Seguridad hemisférica y proyección estratégica
La Operación Lanza del Sur representa una nueva fase en la política de seguridad hemisférica impulsada por Washington. El despliegue militar en el Caribe responde a la creciente preocupación por el tráfico de drogas, el crimen organizado y otras amenazas transnacionales que impactan directamente en la estabilidad de los países del área.
Southcom reiteró que estas maniobras están alineadas con las prioridades estratégicas del gobierno estadounidense, y que la presencia militar en la región busca garantizar la protección del territorio nacional, así como apoyar a los socios regionales en sus esfuerzos por combatir el crimen transnacional.
La publicación de las imágenes y detalles de los entrenamientos refuerza el mensaje de transparencia operativa y reafirma el compromiso de Estados Unidos con la seguridad regional. La Operación Lanza del Sur se perfila como una de las iniciativas más ambiciosas en materia de defensa y cooperación militar en el Caribe en los últimos años.lc