Santo Domingo.- En un contexto donde los consumidores son cada vez más exigentes con la calidad, el origen y la seguridad de los alimentos que consumen, el Bacalao Noruego se ha posicionado en República Dominicana como un referente de confianza dentro del segmento de pescados secos y salados. Importado bajo rigurosos controles sanitarios, medioambientales y logísticos, este alimento no solo es reconocido por su sabor y tradición, sino también por su impacto positivo en la formalización del comercio local, al aportar trazabilidad, transparencia y regulación.
El Consejo de Productos del Mar de Noruega manifestó que el auténtico Bacalao Noruego proviene de uno de los sistemas de pesca más regulados y sostenibles del mundo. “Cada pieza que llega al país puede ser trazada desde las aguas frías del mar de Noruega hasta los anaqueles de supermercados y colmados dominicanos. Esta trazabilidad es posible gracias a estrictos protocolos que garantizan prácticas de pesca responsable, procesamiento adecuado y transporte bajo condiciones de inocuidad”, dijo Orjan Olsen, director para República Dominicana.
Asimismo, destacó que la presencia del Bacalao Noruego impulsa el comercio formal dominicano al elevar el estándar del producto disponible para el consumidor. “Esto representa una alternativa segura para los consumidores, al adquirir un producto claramente identificado en cuanto a su origen, contenido, y todo lo que hay detrás: procesos y certificaciones. Así el consumidor puede tomar decisiones informadas y exigir mejores prácticas en el resto del mercado”, señaló.
Para los comercios dominicanos, el auténtico Bacalao Noruego representa una oportunidad de diferenciarse. Su disponibilidad con etiquetado visible, presentación estandarizada y origen certificado permite al detallista ofrecer un producto de alto valor agregado, con garantías de calidad y respaldo de todo un país que vive de la pesca.
El auténtico Bacalao Noruego conserva su frescura y textura gracias a un proceso de conservación natural que data de hace más de mil años. Además de su valor nutricional, alto en proteínas y bajo en grasa, es altamente versátil y rinde considerablemente en la cocina dominicana. .LC